El sujeto convivía con varios adeptos en una casa situada en plena selva en Tailandia. Será juzgado por delitos de asesinato.

La policía en Tailandia arrestó al líder de una secta que se escondía en la selva cercana a la ciudad de Chaiyaphum, el sujeto fue identificado como Tawee Nanlan, pero se hacía llamar el “Padre de todas las religiones”.

De acuerdo a lo que expone el portal Ladbible, la situación se dio luego que una mujer denunciara al hombre por una serie de delitos. Sin ir más lejos, él vivía con once cadáveres en su casa, incluyendo el de un bebé.

A eso se sumaba que tenía cinco ataúdes fuera del recinto, donde se cree que habría puesto a otras víctimas en el pasado.

Khun Jenjira (53) fue la persona que acusó al líder de aquella secta ante las autoridades, asegurando que él tenía a su madre de 80 años como prisionera.

En ese momento sostuvo que las personas estaban obligadas a seguir rituales casi de veneración hacia el sujeto.

El llamado "Padre de todas las religiones"
Ladibble

“Fui a visitar a mi madre. Vi cómo las mujeres se veían obligadas a seguir un código de vestimenta usando un pareo hasta la rodilla y los hombres tenían que usar pantalones formales”, expuso.

“Pero lo que fue aún más impactante fue ver a mi madre frotar la saliva del líder en la cara y comer la caspa del hombre”, agregó.

Jenjira adujo que muy probablemente su madre era una de las personas que iba a ser sacrificada dentro de las próximas semanas en el grupo.

El coronel de policía Wattanachai Chanthathum agregó que: “Los oficiales ya confirmaron que hay 11 cuerpos en las instalaciones. Todos estaban en descomposición”.

El “Padre de todas las religiones” sería juzgado por varios cargos de asesinato, por lo que podía enfrentar la pena de muerte en su país. Por ahora quedó en prisión preventiva.