Medios de Europa dieron cuenta de una compleja situación vivida en una ciudad rusa días atrás. Se trata de un adolescente de 16 años que salvó a una niña de ser secuestrada por un pederasta. El sujeto fue detenido por las autoridades.

El héroe fue identificado como Vyacheslav Doroshenko, residente de Irkutsk, quien el pasado sábado vio como un hombre de 50 años metía en su auto a una niña de aproximadamente seis años.

La alerta inició cuando la menor empezó a gritar y pedir auxilio. En ese instante Doroshenko acudió a la única persona adulta que estaba cerca. Su nombre era Gleb Sizykh y también transitaba en automóvil por la calle.

Según detalló el medio español La Vanguardia, los dos persiguieron por 15 minutos al secuestrador, hasta que lograron cerrarle el paso en un callejón sin salida del centro de la ciudad.

En ese momento, el sujeto salió de su vehículo y devolvió a la niña a los otros dos hombres: “Lo siento amigo, pensé que era mi hermanita, debo haberme equivocado”, dijo en ese instante. Posteriormente el hombre arrancó del lugar.

Doroshenko indicó en una entrevista que el momento fue sumamente tenso, ya que la menor de edad lloraba desesperada en el instante en que su captor la dejó en el suelo.

Debido a esto, Sizykh ocupó su teléfono celular para llamar a la policía, quienes finalmente lograron contactarse con la madre de la pequeña, que llegó luego de unos minutos al callejón.

“Vi como el hombre obligaba a la niña a subir a un coche. Rápidamente me di la vuelta y vi a una persona adulta, corrí hacia él y le conté lo que había pasado. Inmediatamente después corrimos hacia el coche del secuestrador”, indicó el adolescente.

Denuncias

Luego de devolver la niña a su madre, los dos hombre fueron entrevistados por la policía para recabar información del físico del captor, que resultó ser un pederasta residente del área.

Sin ir más lejos, el sujeto fue detenido dos horas después que se produjera el incidente. En ese momento se conoció su prontuario delictivo: había cumplido dos condenas por violación y había sido liberado en 2017.

El hombre, cuyo nombre no se dio a conocer, ahora podría enfrentar una pena de hasta 12 años de cárcel.

Por su parte, Vyacheslav y Gleb fueron condecorados como ciudadanos modelos de la ciudad de Irkutsk, recibiendo la medalla ciudadana en una concurrida ceremonia.