Medios sudamericanos hicieron eco de la historia de la alemana Heide Mareike Rachidi (31), quien el pasado martes viajó desde Berlín hasta Asunción (Paraguay) para casarse con un hombre que había conocido a través de una app de citas. El joven paraguayo se llamaba Blas Antonio Bogado y desapareció justo el día en que ella llegó al mencionado país. Ahora, la afectada se encuentra varada en el aeropuerto sin poder volver a Europa.

Según detalla el diario La Nación de Paraguay, lo peor de todo fue que el tipo estafó a la mujer por un monto de 500.000 euros (375 millones de pesos chilenos), con los cuales iban a construir una casa.

El citado medio agregó que la identidad de Blas Antonio Bogado es falsa, añadiendo que la persona que realmente contactó a la ciudadana alemana fue un sujeto llamado Daniel Céspedes, quien está en la cárcel por un homicidio que cometió.

Heide Mareike Rachidi | La Nación Paraguay
Heide Mareike Rachidi | La Nación Paraguay

Mareike Rachidi relató a la policía que su “amor virtual” antes le había pedido montos de dinero de 5.000 y 10.000 euros para otros gastos, los cuales nunca fueron justificados.

Actualmente, la mujer se encuentra varada en el aeropuerto Silvio Pettirossi, ya que no tiene suficiente dinero para comprar un boleto de regreso, porque sólo había viajado con ticket de ida.

La joven relató a los medios de comunicación que el sujeto terminó la relación virtual cuando ella había pisado suelo paraguayo, en ese momento le indicó que no quería verla nunca más.

Meses atrás, él le había enviado fotos e indicado que era cabo del ejército, añadiendo que tenía una promisoria carrera dentro de las fuerzas armadas de su país.

EL supuesto Blas Antonio Bogado | La Nación Paraguay
EL supuesto Blas Antonio Bogado | La Nación Paraguay

EL personal del aeropuerto indicó además que les llamó la atención que la mujer se acercara a otros pasajeros para pedirles dinero para comprar comida.

“Ella estaba cómo avergonzada, no quería mostrar su identificación, no pidió ayuda y no quería hablar con nadie. No era normal su actitud”, explicó el administrador del aeropuerto, Fernando Gallardo, a los medios.

Por lo pronto, el servicio del terminal puso en contacto a la mujer con la Embajada de Alemania, donde le podrían proporcionar ayuda para regresar a su país de origen.