La ministra del Medio Ambiente, Carolina Shmidt, se refirió a la polémica generada por la fecha de realización de la cumbre climática, COP 25.
En entrevista con el programa Expreso Bío Bío de La Radio, explicó que “nosotros quisiéramos haber tenido más tiempo para poder preparar un evento de estas magnitudes pero la acción climática no permite titubear”.
Respecto a la supuesta solicitud del Estado de postergar su fecha a enero de 2020, en vez que diciembre de 2019, la ministra dijo que “nunca se ha pedido autorización para postergarla (…) es una carta que se manda dentro del proceso de definición de fechas”.
“Esto es un proceso normal de definición que una vez que se determina la sede, el directorio de las Naciones Unidas decide las fechas en que se haga (…) Chile manda esa carta diciendo sus preferencias en las fechas y de las dos (la ONU) prefiere el mes de enero”, dijo.
Asimismo, explicó que los motivos por lo que el Gobierno prefería que la cumbre hubiera sido realizada en enero es porque “Santiago está más desocupado, hay mayores disponibilidades para todo el mundo, pero lo más importante es que asistieran todos los países”, considerando que algunos Estados de África “por fiestas religiosas tenían dificultades para el mes de enero”.
Consultada por los costos que tendrá para el estado chileno la realización de la cumbre, la ministra sostuvo que se solicitarán 35 millones de dólares al Congreso y el resto del financiamiento se solicita a organismo internacionales de la organización.
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