Sr. Director:

Hasta 13 millones de dólares donó una organización extranjera a distintas ONG medioambientalistas en Chile. ¿Sabrán estos filántropos de Estados Unidos y Europa del destino de sus aportes?

Hoy en nuestro país ingresan fondos desde fuera para financiar activistas políticos radicales, grupos violentos y organizaciones que impulsan malas políticas públicas que están rompiendo el tejido social del sur de Chile.

Así ocurre, por ejemplo, con presiones al Ministerio de Medio Ambiente en la puesta en marcha del polémico Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP) y la Ley Lafkenche, que termina paralizando el progreso en lugares con altos índices de pobreza multidimensional y vulnerabilidad.

La nueva institucionalidad ambiental que está promoviendo el ministerio del Medio Ambiente a través de los denominados “sitios prioritarios” y los 15 reglamentos de la ley que crea el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP) será terreno fértil para seguir alimentando el activismo radical.

En tiempos de elecciones es bueno que la ciudadanía sepa que existen recursos de países competidores o partidos políticos extranjeros, que están incidiendo con fuerza en nuestras políticas públicas y actuaciones de diversa índole que están afectando el destino y la convivencia de millones de chilenos.

Ricardo Hernández
Instituto Res Publica