Con el objetivo de transmitir la preocupación frente al momento que vive el país, la juventud de la Democracia Cristiana (DC) se tomó la sede nacional del partido en Santiago.
Durante la noche del domingo se tomó tal determinación tras una asamblea, donde se argumentó que se tiene la convicción de que la DC no es un partido uniforme, pero debe ser unido en tiempos difíciles para Chile.
Los manifestantes exigen no continuar con una situación de dispersión de sus liderazgos y, por ende, dejar las diferencias de lado y transmitir una sola voz.
Manuel Gallardo, presidente nacional de la Juventud Demócrata Cristiana, señaló que no es posible que estemos en medio de una aguda crisis política y social, y que no exista como partido una opinión única en temas importantes.
Otras de las medidas argumentadas por los dirigentes es el tema de limitar la reelección para militantes de la DC, es decir, que desde las elecciones parlamentarias del 2021, todos aquellos que lleven dos o más periodos no vayan a reelección.
Desde la Juventud Demócrata Cristiana esperan una reunión con la mesa central del partido, el jefe de la bancada de diputados y de senadores a fin de transmitir un espíritu de unidad.
