Las estudiantes en toma de la Facultad de Educación de la Universidad Diego Portales acusaron agresiones verbales y humillaciones por parte de Carabineros contra una de sus compañeras, quien fue detenida en el marco de una manifestación y que resultó con el esguince del dedo pulgar de una mano.

Los hechos se remontan al pasado miércoles y fueron a dados a conocer por una declaración publicada en Redes Sociales, donde indicaron que la detención se produjo tras un corta calles realizado a las 16:30 “como respuesta ante las negligencias por los casos de abuso y de acoso que la Universidad Diego Portales sigue perpetuando indiscriminadamente”.

“Nuestra compañera se encontraba en la manifestación cuando interrumpieron de manera abrupta y violenta; ella, sin capucha y sin ocasionar destrozos, como todas las personas que nos encontrábamos ahí, fue víctima de un acto totalmente teatral por parte de Carabineros, la empujaron para buscar un motivo y llevársela detenida, ya que cargaba con un lienzo de 6 metros y se dirigía caminando a la facultad, pero FFEE se sintió tremendamente amenazados por un pedazo de tela y se jactaron de que nuestra compañera ‘se lo buscó"”, relataron.

Así, relataron que en el forcejeo producido al momento de la detención, “llegaron más funcionarios a oprimirla violentamente, la amenazaron físicamenmte en la cara y uno de ellos, el mismo que la empujó para luego decir que ella fue la que empezó con los golpes (lo cual es mentira), le ocasionó un esguince en el dedo pulgar de la mano izquierda para inmovilizarla y subirla al retén”.

Larga detención sin acceso a un baño

“Se hizo el procedimiento de constatar lesiones y nuestra compañera fue liberada alrededor de la 1 de la mañana en condiciones paupérrimas y con una citación a la Fiscalía con probables sanciones de arresto. En el intertanto no se le permitió ir al baño, se le negó la posibilidad se sentarse en una silla, se burlaron de ella por ser ‘feminista’, la amedrentaron psicológicamente y la interrogaron de preguntas sobre la movilización de su espacio, la amenazaron con tenerla en ‘lista negra’ y con denunciarla por calumnias ya que Carabineros nunca admitió haberle ocasionado el esguince hasta que diagnóstico médico lo decretó”, acusaron.

Desde la asamblea feminista denunciaron que “fueron horas con dolores en el cuerpo, contusiones en los brazos, rasmillones en las piernas y la mano izquierda inmóvil, con mucho frío y hambre, quemándose las piernas por la orina seca de su ropa”.

Durante la detención, la joven también habría tenido que aguantar un trato humillante y machista, “aguantando comentarios violentos de los mismos funcionarios que la denigraban por ser mujer, ya que ella ‘debería estar en la cocina, no en una comisaría’, según FFEE”.

“No queremos que ninguna de nosotras tenga que volver a pasar por lo mismo, nuestra compañera está muy afectada emocional y físicamente, pero estamos aquí para apoyarla y difundir, con su consentimiento, un poco de todo lo que ella vivió en las últimas horas, para que abramos los ojos y nos demos cuenta de lo que está pasando y sigue pasando en pleno año 2019”, concluyeron las estudiantes en su comunicado.

Consultados por BioBioChile, desde Carabineros confirmaron que la detención se efectuó por desórdenes, pero desistieron de entregar su versión de lo sucedido, indicando solamente que los antecedentes fueron puestos a disposición de la Fiscalía Centro Norte.