La Comisión Nacional Evangélica por la Familia (Confamilia) y el Movimiento Universitarios por la Vida presentaron una denuncia ante la Seremi de Salud Metropolitana en contra de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH).
Según ambos movimientos conservadores, en la agenda anual de la FECH se entrega información para usar misoprostol y abortar de forma segura hasta determinada semana de gestación.
Esteban Pérez, coordinador regional de Confamilia, definió como “inaceptable” que en la agenda estudiantil se promueva el aborto con un medicamento, a su juicio, altamente riesgoso.
Rosa Oyarce, seremi de Salud de la región Metropolitana, recibió la denuncia, pero señaló que el organismo no puede investigar, por lo que reenvió los antecedentes al Ministerio Público. También indicó que la administración de este medicamento sin supervisión médica puede causar la muerte.
La presidenta de la FECH, Karla Toro, defendió el manual e indicó que es un protocolo estipulado por la federación de estudiantes para evitar abortos clandestinos, que son altamente riesgosos para las mujeres que desean interrumpir su embarazo.
Por su parte, el rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi, señaló que no conoce el protocolo de aborto.
La agenda ya fue recibida gratuitamente por estudiantes de primer año y adquirida por alumnos de cursos superiores.
