Lo ocurrido es sospechoso, según concejales, quienes incluso advierten motivaciones políticas detrás de la mala evaluación.

Una pugna que llegó a tribunales enfrenta al alcalde de Concepción y a la directora de Salud Municipal (DAS), esto luego que la calificación de la funcionaria la sacara de la Lista 1 y la dejara en la 2.

Durante toda su carrera, incluidos los últimos 8 años como jefa de la DAS en la Municipalidad de Concepción, Rosario Bustos ha sido evaluada con distinción en Lista 1.

Sin embargo, para el proceso 2021-2022 los 92 puntos obtenidos la dejaron en la Lista 2, calificación que sólo tiene el 10% del personal de la Dirección de Salud y en general del municipio.

Luego que la Contraloría se desentendiera de la impugnación, señalando que la directiva debía apelar primero ante el alcalde Álvaro Ortiz, Bustos decidió ir a la Corte de Apelaciones penquista con un recurso de protección, no sólo contra el jefe comunal sino también los jefes de la Contraloría regional y nacional.

La presidenta de la Asociación de Directivos Profesionales y Técnicos, Janette Cid, sin mencionar al alcalde, lamentó que autoridades dejaran que el conflicto llegara a los tribunales, aunque admitiendo que no le llamaba la atención.

La pugna está generando suspicacias entre los ediles, tal como lo sostuvo la concejala Claudia Arriagada, defendiendo el desempeño de la directora de la DAS.

Por su parte, el concejal, Boris Negrete, fue más allá y apostó a que detrás de la mala evaluación de Rosario Bustos hay un componente político.

Como precandidato a alcalde de Concepción, el consejero regional, James Argo, está siguiendo de cerca el trabajo municipal.

En ese sentido, expresó que el caso de Rosario Bustos demuestra el uso de político de la corporación edilicia por la actual administración.

Consultado, hasta ahora el municipio no se ha referido al tema y la directora de Salud se excusó a la espera de lo que resuelva la Corte.

Sin embargo, del recurso se conoció que su principal preocupación es la posición en que queda su autoridad frente a una planta funcionaria y directiva mejor evaluada que ella.