El hallazgo de un vehículo en la desembocadura de Hualpén tras una balacera, permitió capturar a un menor y su hermano, ambos involucrados en una serie de portonazos en el Gran Concepción. Nuevos detalles conocidos señalan que el menor se teñía el pelo para evitar a los policías.

Dos hermanos, de 17 y 24 años, fueron detenidos por su presunta participación en al menos seis delitos de robos con intimidación y portonazos realizados en comunas del Gran Concepción.

Según indicó la PDI, uno de los hermanos se teñía continuamente el pelo, con el objetivo de no ser detenido y evadir a las policías.

El jefe de la Brigada Investigadora de Robos Concepción, subprefecto Cristian Lara, indicó que en varios de los delitos asociados a estos jóvenes, las víctimas son conductores de aplicación.

El procedimiento para robar los vehículos era intimidar con armas de fuego a los conductores, para sustraer los autos y luego abandonarlos.

En específico, indicó la PDI, estos hermanos habrían participado en el robo con violencia a una pareja de la tercera edad el pasado 2 de octubre en Talcahuano.

Las víctimas de este caso fueron abordadas cuando salían de un culto evangélico. Los dos adultos -pastores de su comunidad- fueron brutalmente golpeados. Incluso la mujer fue arrastrada cerca de 10 metros mientras estaba tomada de la puerta del vehículo, con el objetivo de ayudar a su esposo.

“Uno de los detenidos intentó cambiar su apariencia tiñéndose el pelo de otro color para evitar ser capturado, sin embargo, ayer (miércoles) este menor participó de un hecho de violencia en Talcahuano, donde resultó herido con impactos de bala y tras ser trasladado al Hospital Higueras, fue detenido por nuestros detectives”, indicó Lara.

Desde el Ministerio Público indicaron que se les imputarán cuatro delitos: un robo con secuestro registrado en septiembre y tres por delitos registrados el 2 de octubre contra conductores de aplicación y los pastores evagélicos.