La banda criminal dedicada al robo de madera en la región del Bío Bío y La Araucanía, funcionaba como una verdadera empresa delictual. Así quedó evidenciado en la audiencia en contra de los 12 imputados por el caso, acusados de asociación ilícita, usurpación violenta, disparos injustificados, hurto simple de madera mayor a 400 UF, receptación, extorsión, porte y tenencia ilegal de arma de fuego, entre otros.

Este viernes se desarrolló la formalización de cargos de 12 detenidos, acusados de formar parte de una organización delictual dedicada al robo de madera en las regiones de Bío Bío y La Araucanía.

El proceso investigativo constata una estructura que vincula a empresarios forestales con la Coordinadora Arauco Malleco.

El Ministerio Público imputa los siguientes delitos a los aprehendidos: asociación ilícita, usurpación violenta, disparos injustificados, hurto simple de madera mayor a 400 UF, receptación, extorsión, porte y tenencia ilegal de arma de fuego, amenazas condicionales. A uno de ellos además se suma la conducción con placa patente adulterada.

Según la indagatoria, Miguel Terán Carrasco y Emanuel Espinoza Contreras liderarían una organización en la que además participan Miguel Espinoza Contreras, Arnaldo Millán Marín, Solange Vásquez Palavecino, Dany Conejeros Sepúlveda, Aníbal Millán Flores, Luis Baeza Millán, Sergio Chandia Reyes, Marcos Vega Muñoz, Marcos Cáceres Burdiles, Gabriel Nova Sepúlveda, Segundo Hidalgo Gallardo y Joaquín Gavilán Gavilán.

Todos cumplían roles y tareas definidas para ingresar a predios forestales, donde mediante la violencia y el uso de armas de fuego, concretaban el robo de madera para luego venderla a aserraderos de las regiones del Bío Bío y La Araucanía.

Los hechos

El 12 de noviembre de 2021, a eso de las 15:00 horas, un grupo aproximado de 12 sujetos a rostro cubierto y provisto de armas de fuego, ingresaron simultáneamente a tres predios, dos de Forestal Mininco y uno de Sonia Bachman Cerda.

Allí cortaron árboles para impedir el acceso de sus dueños y efectuaron disparos hacia personal de Carabineros y al Ejército.

Luego, los encapuchados armados que se encontraban en los predios, reivindicaron públicamente la usurpación con apoyo de la Coordinadora Arauco Malleco.

Una vez que los imputados lograron repeler e impedir el acceso de sus dueños y personal policial a dichos predios, comenzaron a extraer la madera que se encontraba en su interior, que corresponde a pino insigne, para lo cual se concertaron con Emanuel Espinoza Contreras, representante de la empresa Emanuel Antonio Espinoza Contreras, junto a su hermano y socio Miguel Espinoza Contreras, sus conductores Sergio Chandia Reyes, Marcos Vega; y el operador de maquinaria José Vivando.

De esta forma es que formaron una verdadera empresa dedicada al delito del robo de manera, puesto que operaba con una infraestructura, maquinaria y roles definidos para perpetrar el delito y luego vender las especies.

Así las cosas, la imputada Carolina Andrea Rubio Escobar, también empleada de la empresa Forestal Bosques Sur, se encargaba de vender y coordinar la entrega de la madera sustraída, mientras que la imputada Solange Andrea Vázquez Palavecino -jefa de faena de la empresa Forestal Bosques Sur SPA.- coordinaba la extracción de madera, y se contactaba directamente con el imputado Arnaldo Millán Marín.

Este último, junto con Dany Conejeros Sepúlveda, Aníbal Millán Flores, Luis Baeza Millán, y otros sujetos no identificados, mantienen la ocupación ilegal del predio, además Millan Marín actúa como intermediario entre estos sujetos y los representantes de Forestal Mininco.

Es en este contexto, desde mediados de junio y hasta el 01 de julio de 2022, Aquiles Yañez Bravo y Marcos Yañez Verdugo, concurrieron al predio Los Chilcos (de Forestal Mininco) con un carro de arrastre a retirar madera de pino radiata sustraída por las personas que se encontraban haciendo ocupación ilegal.

La madera fue previamente vendida por Arnaldo Millán en coordinación con Solange Vásquez, realizando a lo menos 5 viajes al predio para entregar la madera sustraída en la región del Bío Bío.

Extorsión a dueña de predio

Una vez que los sujetos comienzan a percibir demasiada presencia policial en los alrededores de “sus terrenos”, y encontrándose los territorios usurpados con sujetos armados en su interior, fue a través de Emanuel Espinoza que contactaron a la dueña de uno de los predios, Sonia Bachman.

Esto lo hicieron con la intención de evitar que alguien resulte herido o muerto.

A ella le solicitaron firmar, mediante extorsión, un contrato en el que ellos pagaban la suma de $30 millones por concepto de acuerdo reparatorio respecto de la formalización de Vivanco Pinto y el pago de $90 millones de pesos, por la venta del resto de los árboles de pino que quedaban en pie en su predio, que tenía una extensión de 20 hectáreas aproximadamente.

La víctima debió acceder al no tener más alternativa, ya que los mismos imputados seguían impidiendo su acceso al predio y la extracción de la madera apta para explotación forestal, firmando contrato de compraventa ante notario de Galvarino, el 4 de abril de 2022.

De esa forma, Emanuel Espinoza entregó a Bachman 9 cheques, por la suma de $10 millones cada uno y un cheque por la suma de $30 millones de pesos.

La mujer de más de 80 años y propietaria del predio, renunció de esta manera a su expectativa de venta del bosque, que alcanzaba los $600.000.000.

En paralelo, toda esta situación estaba siendo monitoreada por imágenes de dron e interceptaciones telefónicas, cuyas escuchas dan cuenta de que todos los involucrados saben que cometen delito.

Intento de extorsión a Forestal Mininco y agente encubierto

Por la misma razón que extorsionaron a la adulta mayor, Bechman, los imputados se contactaron vía correo electrónico con la Forestal Mininco.

Fue a propósito del ingreso de personal policial y la correspondiente incautación de maquinaria forestal y camiones asociadas a Bosque SUR SPA, así como la detención de dos de sus choferes de camión, que en septiembre de 2022, Arnaldo Millán envió un correo electrónico a los representantes de Forestal Mininco.

En el documento adjuntó una misiva con el afán de que la empresa propietaria del predio disponga de 70 millones de pesos en favor del grupo denominado LOF XILCOS. Esto a cambio de poner un alto al fuego entre los ocupantes del predio y las víctimas.

Ante lo cual se programó una reunión presencial en Temuco donde concurrieron el mismo Arnaldo Millán, Dany Conejeros y un tercer sujeto a sostener las exigencias antes expresadas en la carta remitida vía correo electrónico otorgando como plazo a Forestal Mininco para dar respuesta a sus requerimiento hasta final de mes de Octubre de 2022.

Es en esta cuando la investigación toma un importante avance, ya que, según lo informado por Radio Bío Bío, a esta reunión asistió un agente encubierto.

De las indagatorias se desprende que, para el respaldo en seguridad durante los constantes enfrentamientos con el Ejército y Carabineros, uno de los involucrados pertenecería a la Coordinadora Arauco Malleco (CAM).

De hecho, pese a que los policías pudieron ingresar en ocasiones a los predios e incluso incautar vehículos, debido a la magnitud de la operación, los imputados seguían adelante con esta empresa dedicada al delito.

Cabe mencionar que, en uno de los allanamientos liderado por Carabineros a uno de los predios tomados, fue encontrada una escopeta artesanal, un cartucho calibre 12 marca GB Country; 25 cartuchos marca Country GB; 23 cartuchos marca Competición; 27 cartuchos marca Fiocchi, y una motosierra marca Stihil.

Además de una billetera con cédula de identidad y licencia de conducir a nombre Aníbal Millán Flores.

¿Dónde iba a parar la madera robada?

En virtud a lo expuesto, el monto recaudado por el robo y venta de madera asciende a la suma de $406.839.400, correspondiente aproximadamente a 9.697 metros cúbicos de dicho producto, afectado a 29,53 hectáreas de árboles de pino que se encontraban al interior de el fundo LOS CHILCOS y fundo Epuñan 1.

Mientras que en el fundo Lo Pérez, de propiedad de Sonia Bachaman Cerda, el monto de lo sustraído corresponde a 15 hectáreas avaluadas en 150 millones de pesos aproximadamente.

Respecto de la interrogante más común en este tipo de situaciones, que es a dónde va a parar la madera robada y quién la compra, esta tenía destino en distintos aserraderos ya identificados. Estos son Pomasa, Laminadora Los Ángeles S.A., Forestal Pezoa, Ecopar, Aserradero Rosario, Aserradero Sara, Río Blanco, Aserradero Los Castaños, Maderas Copihue SPA.

Todas ubicadas en las regiones del Bío Bío y Araucanía.