Una niña miembro del Colegio Umbral de Curauma en Valparaíso, chocó contra un fierro que transportaba un trabajador de construcción, durante su clase de educación física. Tras esto, la menor quedó con graves lesiones y presentó la pérdida de piezas dentales. Su apoderada le exige al colegio que se responsabilice por su tratamiento.

Apoderados del Colegio Umbral de Curauma en Valparaíso, denuncian un grave accidente que sufrió una alumna de 5to Básico tras chocar con un fierro en la clase de educación física.

Se trataría de materiales de construcción que estaban siendo manipulados por personal ajeno al establecimiento.

Todo ocurrió a primera hora el pasado lunes 14 de noviembre, cuando los estudiantes del Colegio Umbral de Curauma realizaban su clase de educación física, allí una de las niñas, mientras corría por las inmediaciones del gimnasio, chocó de frente con un trabajador externo al establecimiento que transportaba un perfil de fierro.

De inmediato se llamó a la apoderada de la niña para que fuera a buscarla al recinto educativo, en donde se encontraba la menor con heridas graves, como un TEC y la pérdida parcial de algunos dientes, por lo que fue trasladada de urgencia hasta el Hospital Carlos Van Buren.

Claudia Galaz, una de las apoderadas del colegio, entregó mayores detalles sobre el accidente.

Apoderada exige que colegio responda por el tratamiento de la niña

Inmediatamente la apoderada realizó una denuncia ante la Superintendencia de Educación en donde acusa completa negligencia por parte del establecimiento. Exige que este recinto tome completa responsabilidad en el tratamiento de la menor.

Desde la Dirección del Colegio Umbral de Curauma emitieron un comunicado, indicando que se inició una investigación interna, en la que tomarán parte la Superintendencia de Educación, el Mineduc y otras instituciones pertinentes para aclarar lo sucedido.

Cabe indicar que los apoderados acusan que los materiales que están en el colegio son de una obra externa, que tiene que ver con la construcción de canchas por parte del propio sostenedor del colegio, una situación que deberá ser investigada por la Superintendencia de Educación y la Seremi de Educación.