Cerca de dos horas duró la visita de la ministra Ximena Aguilera a la región Los Ríos, tiempo en el que se reunió con integrantes de las comunidades mapuches que participaron en la consulta indígena por los hallazgos arqueológicos que mantienen detenidos hace más de dos años los trabajos de construcción del hospital de La Unión.

Con bastante hermetismo llegó a La Unión la ministra de Salud, Ximena Aguilera, para reunirse con comunidades mapuche que fueron parte de la consulta indígena por los hallazgos arqueológicos en el terreno del nuevo hospital de La Unión.

Hubo profundas críticas por la discreción en la visita de la secretaria de Estado, quien no accedió a entregar declaraciones ni a reunirse con el movimiento ciudadano que exige la agilización del recinto asistencial.

En la reunión, estuvieron presentes autoridades regionales, entre ellas el gobernador de Los Ríos, Luis Cuvertino, quien reveló algunos de los compromisos adquiridos con las comunidades.

Pero la breve y hermética visita de la ministra Aguilera estuvo marcada precisamente por la molestia en torno al secretismo con el que se manejó el viaje.

Hasta el exterior donde se realizó la reunión con las comunidades mapuche llegó un grupo, compuesto por integrantes del movimiento ciudadano por el hospital de La Unión.

Esperaban tener un espacio para dialogar con la ministra y conocer los avances para reanudar la esperada construcción del hospital, pero no fue posible.

La secretaria de Estado no entregó declaraciones, a pesar de que su equipo de comunicaciones había indicado en primera instancia de que sí lo haría.

La ministra subió al furgón que la trasladaba y a la salida, el paso fue bloqueado por los ciudadanos que intentaron dialogar con ella, limitándose a esconder el rostro, para no ser captada por las cámaras de los medios de comunicación que estaban en el lugar.

En paralelo, algunos de los manifestantes la increparon por no reunirse con el movimiento ciudadano.

La integrante del movimiento por el nuevo hospital de La Unión, Amelia Araya, sintió la falta de diálogo de la ministra como un portazo en la cara.

También hubo críticas desde la Fenats del Hospital de La Unión. Su presidenta, Sara Barría, lamentó que la ministra de Salud no pase a visitar las actuales condiciones del hospital.

También se refirió la senadora de Renovación Nacional, María José Gatica, asegurando que la ministra viajó a escondidas.

Consultado por el hermetismo en torno a la visita de la titular de Salud, Ximena Aguilera, el delegado Presidencial, Jorge Alvial, descartó que se tratara de una actividad oculta a la ciudadanía.

Tras la reunión con las comunidades, la Delegación Presidencial difundió un video en el que se detallan los acuerdos con las comunidades mapuches. Entre ellos, se plantea el resguardo del rewe, o sitio ceremonial instalado en el terreno del hospital; el reentierro de los hallazgos arqueológicos en el mismo lugar donde fueron encontrados, y la implementación de un modelo de salud intercultural en el nuevo hospital.

Pero más allá de los acuerdos, quedó instalada la molestia de al menos un grupo de habitantes de La Unión, por la actitud de una ministra de Estado, que viaja con fondos estatales, sin informar su agenda y sin acceso a dialogar con la ciudadanía, en torno a un proyecto postergado y esperado por la comunidad.