La Corte Suprema rechazó el recurso de casación presentado por Celulosa Arauco. Por tanto, la empresa deberá pagar cerca de $4.000 millones por incumplimientos ambientales y no informar lo ocurrido en las aguas del río Cruces. Esto pone fin a más de 7 años de proceso judicial entre la Superintencia de Medioambiente y la empresa.
La Corte Suprema rechazó el recurso de casación presentado por Celulosa Arauco y Constitución (Celco). La empresa, que buscaba anular la sanción de la Superintencia Medioambiental (SMA), deberá pagar una multa de $4.000 millones por infracciones ambientales.
En 2016, la SMA sancionó a Celco con 5.360 UTAs (Unidades Tribunarias Anuales) – poco más de $4.600 millones – por incumplientos en la Planta Valdivia, principalmente entre 2013 y 2014, en el río Cruces.
Tras un extenso período de causas judiciales, donde ambos entes acudieron hasta el máximo tribunal de justicia del país, la Corte Suprema terminó por rechazar las acciones.
No obstante, estableció que Arauco deberá pagar una multa de cerca de $4.000 millones al SMA. Por su parte, la Superintendencia de Medioambiente tendrá que reclasificar uno de los cargos formulados.
Lo anterior, ya que el tribunal descartó el derrame de residuos a la muerte masiva de peces en el río registrado en la fecha de la investigación.
Entre los cargos presentados contra Celulosa Arauco, se determinó que la empresa no informó el vertimiento de un líquido de color verde en las aguas del cauce. Asimismo, indicaron que no había construído algunas estructuras en su planta, entre otras.
Proceso judicial
En primera instancia, en 2018, Arauco acudió al Tercer Tribunal Ambiental de Valdivia con el objetivo de dejar sin efecto la sanción.
El Tribunal Ambiental admitió el recurso. Sin embargo, en 2020 determinó una reclafisicación de la millonaria multa. Es decir, una rebaja de $1.500 millones a la sanción del SMA.
Este conflicto judicial llegó hasta la Corte Suprema, donde se terminó por reafirmar lo que había establecido el tribunal de ambiente.
Arauco y episodio de contaminación
Fue en 2014 cuando se conoció que más de 2.000 peces habían aparecido muertos en el río Cruces.
Esta tragedia ambiental apuntó a la Planta Valdivia de Celulosa Arauco, emplazada a pocos metros del sector y cuyos desechos desembocaban en el cauce.
Posteriormente, se sumó a la investigación por parte del SMA contra Celco, iniciada en 2013 a partir de otras fiscalizaciones por distintos departamentos públicos.
La Superintendencia de Medio Ambiente detectó 11 incumplimientos relacionados, en su mayoría, por el vertido de riles. Esto no fue informado a los organismos fiscalizadores.
Finalmente, la Corte Suprema hizo efectiva las sanciones contra Arauco a partir de las infracciones presentadas. No obstante, indicó que el derrame del “licor verde” industrial no estaba relacionado con la muerte de los peces.
