A la justicia llegó el caso de un joven dominicano, quien tras auto-denunciarse por ingresar de manera irregular al país, acusó lentitud en el proceso y por lo cual habría quedado sin trabajo: requiere dinero para tratar el cáncer a la sangre de su hija de 8 años.

El Tribunal de Alzada rechazó la acción, dando por acreditado que restan trámites administrativos sobre el caso en la intendencia de Los Lagos.

En enero del año 2020, Jorge Benítez de nacionalidad Dominicana, traspasó fronteras desde Guyana -en su país-, luego Brasil, Bolivia, Perú, ingresando a Chile por el norte, a través de un paso no habilitado.

Según su representante, el presidente del Colegio de Abogados en Osorno, José Manuel Baquedano, indica que Benítez se auto-denunció al llegar, para regularizar su situación, conseguir trabajo y enviar dinero a su familia, para costear la vida y tratamiento de su hija de 8 años con cáncer a la sangre.

Sin embargo, pese a varias consultas no tuvo respuestas, perdió el trabajo por su situación irregular, y el 2 de marzo de éste año recibió un oficio sobre su situación en el país, por el cual acusaron inacción desde la administración regional, y que decantó en un recurso de Amparo.

Tras los alegatos, la Corte de Apelaciones de Valdivia rechazó el recurso, dando por acreditado que restaban trámites antes de una posible expulsión.

Consultado al respecto, José Ignacio Anrique, encargado del departamento de Extranjería y Migración de la Intendencia en Los Lagos, aseguró que el joven no ha presentado los antecedentes requeridos.

Agregó que desde el año 2015 existe un superávit de migrantes en la región, y que dos personas de la repartición deben revisar en torno a 200 causas semanales, descartando mora en el proceso. A si vez clarificó que si el ciudadano acredita su caso, podrá ser revisado directamente por el Ministerio del Interior con carácter humanitario.

Desde la defensa del dominicano indicaron que apelarán a la Corte Suprema.