Dos carabineros (r) fueron condenados por apremios ilegítimos contra siete personas entre 1973 y 1974, en la localidad de Castro.

Luis Ulloa Bahamonde y Carlos Cifuentes Hernández, ambos funcionarios en retiro, deberán cumplir cuatro años de presidio pero con el beneficio de libertad vigilada intensiva.

El ministro, Alvaro Mesa, condenó también a los uniformados a la inhabilitación para cargos y oficios públicos mientras dure la condena.

Los condenados participaron en la detención de un comerciante y trabajador radial, militante del Partido Comunista, quien estuvo 10 días sentado en el piso, usando un baño común con las otras 6 personas y siendo interrogado en la guardia del cuartel policial sin formalidades.

Alicia Lira, presidenta de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos, dijo que están contentos con el fallo.

Mauricio Maya, jefe regional del Instituto Nacional de Derechos Humanos, valoró la sentencia.

El mismo fallo condenó al Fisco a pagar una indemnización de veinte millones de pesos por el daño moral a 4 de los 7 afectados.