Desde la organización acusaron que la actual Constitución no resguarda suficientemente los Derechos Humanos. Por ello, requiere un cambio que se adecúe a las necesidades, tras lo cual se mantendrán alerta para que se cumpla.
Durante este viernes, la organización de Amnistía Internacional afirmó que es indiscutible que Chile necesita una nueva Constitución. Acusan que la actual no está a la altura de los estándares de Derechos Humanos (DD.HH), por lo que vigilarán el proceso constituyente.
En concreto, el organismo aseguró que la Carta Magna vigente beneficia a unas personas por sobre otras, acentuando las desigualdades y la precariedad de los grupos históricamente excluidos.
En este contexto, la organización enfatizó en que estarán alerta a la reforma constitucional que se debe llevar a cabo para activar el nuevo proceso constituyente. Sostuvieron que esta no debe contradecir de ninguna manera los principios fundamentales de los DD.HH.
En específico, recalcaron que es fundamental que el proceso constituyente sea transparente, inclusivo, participativo y siempre de cara a la ciudadanía.
Es por ello, que estarán vigilando la implementación del “Acuerdo por Chile” al que llegaron algunos partidos políticos con representación parlamentaria.
Lo anterior, dado que vislumbran a priori este nuevo proceso como menos participativo, debido a sus características de composición. Además del reducido tiempo que tiene el texto constitucional para su elaboración.
Proceso constituyente: elección de Comité de expertos
Por otra parte, subrayaron que se debe especificar de manera detallada qué características y requisitos deben cumplir las personas integrantes del “Comité de expertos”, así como aclarar el mecanismo para su designación.
Por tanto, precisaron que es importante asegurar que quienes participen en el proceso constituyente sean representativos de la diversidad del país y actúen con imparcialidad en todo momento.
De esta manera, Amnistía Internacional advirtió que mantendrán, desde vigilancia, hasta incidencia para asegurar que la Carta Magna se sitúe centrada en los Derechos Humanos.
Finalmente, destacaron que así se asegurarán de mejorar las condiciones de vida de todas las personas, construyendo una sociedad más igualitaria y justa.
