“No hay nadie en esta convención que haya llegado a lucrar”, asegura Patricia Politzer ante el aumento de las asignaciones a los convencionales constituyentes, en medio de críticas por no haber iniciado aún el debate de temas constitucionales. Descarta que sean “flojos” y enfatiza en que en estos momentos es muy importante trazar una buena hoja de ruta a través de un reglamento que asegura una nueva Carta Magna.

“Sin un buen reglamento, no habrá una nueva constitución”, sentencia la periodista.

A un mes de iniciar su trabajo, la constituyente por Independientes No Neutrales asegura enfática en que no hubo polémicas al interior de la Convención Constituyente, sino más bien declaraciones “estridentes” de un grupo minoritario de derecha.

Aunque, de todas formas reprocha duramente la presencia de Jorge Arancibia en la Comisión de Derechos Humanos, señalando que es una falta de empatía y una imprudencia.

Un balance positivo

– ¿Cuál es su balance a un mes de iniciado el trabajo de la constituyente?

Mi balance es muy, muy positivo, contrariamente a lo que se escucha en algunas declaraciones de que no estamos haciendo nada, de que somos flojos. Hay que recordar que la instalación fue bastante difícil y perdimos ahí un par de días la primera semana porque no existía nada, es decir, la hoja en blanco no era solo en el texto constitucional, sino que el vacío era absoluto, no había computadores, no había basureros, no había nada.

En menos de un mes tenemos una mesa directiva ampliada con siete vicepresidencias adjuntas que representan prácticamente todo el espectro de sensibilidades y pluralidad que tiene la convención, y además hay ocho comisiones provisorias trabajando a toda máquina, entonces creo que en términos muy concretos ha sido muy productivo este primer mes.

– ¿Entonces es una fake news lo que se ha pretendido instalar con el tema que no se está trabajando, que son “flojos”? ¿Hay una intención de algún sector de instalar eso?

Yo no quiero juzgar intenciones, lo que yo veo es algunas declaraciones que no se ajustan para nada a la realidad y no sé si vienen desde dentro de la constituyente o de fuera, pero lo concreto es que con cualquier persona que hablas te va a decir todo lo que hemos trabajado, prácticamente todos los días trabajamos mañana y tarde, como todos los trabajadores de Chile. Pero además, con mucha intensidad, porque la tarea que tenemos es de una responsabilidad enorme.

– ¿Y no se sienten presionados por los tiempos? Porque la crítica también es que les queda poco tiempo para trabajar.

Aquí hay dos cosas. En primer lugar es cómo van los tiempos y otra cosa es cómo vamos avanzando. En esta etapa, nuestro foco está en elaborar y definir un buen reglamento. Sin un buen reglamento, no habrá una nueva Constitución. Y esto es bastante evidente, basta mirar un partido de fútbol, si no sabemos las atribuciones que tiene el árbitro, si no entendemos que el partido se juega en dos tiempos de 45 minutos, no podremos jugar el partido. Aquí estamos en esa etapa, fijando las reglas para jugar el partido y las reglas son fundamentales para que el partido se juegue bien y no se bloquee y no hayan conflictos insalvables. Esa es la relevancia que tiene la etapa actual, y se ha definido que un buen reglamento se puede redactar y acordar, entre dos y tres meses. Por lo tanto, no tendremos discusiones sobre contenidos propiamente constitucionales hasta fines de septiembre, probablemente.

Entonces quienes dicen cómo es posible que todavía no hayan escrito ni un sólo artículo de la Constituyente, o son personas bien intencionadas que no saben cómo funciona esto, o bien son personas claramente malintencionadas que están tratando de torpedear la constituyente

– ¿Qué opina de la intención de un sector de la izquierda de “refundar” a partir de la nueva constitución?

Yo prefiero hablar de un cambio de rumbo, creo que la historia se construye desde el pasado y por lo tanto no creo que la palabra adecuada sea refundación. Pero sí, un cambio de rumbo profundo. Yo creo que no hay que olvidar que estamos en medio de una profunda crisis política, social y económica, no ha terminado la crisis, la crisis está latente, y el camino consttiucional se abrió como una salida a esta crisis profunda. Y en ese sentido, creo que tenemos que avanzar con máxima celeridad, es muy urgente nuestro trabajo, porque el país está esperando el cambio de rumbo. Y por lo tanto, confío en que logremos cumplir los tiempos que se nos dieron. Y por lo menos en esta etapa, los estamos cumpliendo bien.

– ¿Cómo ha sido el trabajo con fuerzas políticas como el Frente Amplio, la Lista del Pueblo y Vamos Chile?

Creo que poco a poco se van abriendo conversaciones entre todos los sectores, y eso es muy estimulante. Poco a poco cada uno va saliendo de su grupo de origen, por llamarlo de alguna manera, porque la inmensa mayoría somos independientes que llegamos con algún colectivo a la convención, pero poco a poco las barreras entre un colectivo a otro se van abriendo y vamos conociéndonos, vamos conversando, buscando nuestros puntos de encuentro, vamos comprendiendo por qué el otro piensa como piensa, de dónde viene, cuál es su historia y eso va ayudando a tener acuerdos transversales, que es lo que creo que va a pasar cuando entremos a los temas de fondo. Creo que van a haber muchas mayorías muy diferentes.

– ¿Pero y no atenta contra esa apertura las diferencias que han mostrado el Partido Comunista con el Frente Amplio? ¿Eso ha tensionado la convención?

– Personalmente no me ha tensionado nada, supongo que habrá tensionado a algunos integrantes del Partido Comunista y del Frente Amplio, pero para el trabajo constitucional no ha sido una tensión.

– ¿Entonces ustedes miran desde afuera ese conflicto que se generó?

Absolutamente, ese es un conflicto político entre ellos que está fuertemente marcado por la política coyuntural por un año electoral, pero no tiene nada que ver con el trabajo constituyente. Y afortunadamente, la mayoría de los convencionales hace grandes esfuerzos por dejar la coyuntura fuera del debate constitucional, que creo que es lo que corresponde. Estamos haciendo una constitución que debiera regir el país por 50 años, la coyuntura no tiene ninguna relevancia para mirar las reglas del juego fundamentales de nuestra sociedad por los próximos 50 años.

Alianzas independientes

– ¿Qué tipo de alianzas se han formado? ¿Se rompe un poco esa lógica de los dos bandos que existió en el Congreso en los últimos años?

Creo que mirar la convención con la lógica de la política tradicional y con la dinámica del Congreso en los últimos años, hace incomprensible lo que está pasando dentro de la Convención. Dentro de la Convención hay una lógica completamente distinta. En primer lugar, el grueso somos independientes, no somos militantes de partidos políticos. Algunos vienen de un trabajo político social completamente distinto, muchos vienen del trabajo territorial en movimientos sociales enfocados a distintos temas, con prácticas políticas muy horizontales. No hay dinámicas de autoridades que definan el pensamiento del grupo, como ocurre con los partidos. Cuando uno escucha hablar a los constituyentes, lo hacen con una enorme libertad porque la mayoría siente que no le tiene que estar dando cuenta a nadie, no tiene que estar adecuándose a un pensamiento totalizante de algún grupo.

– ¿Con qué sector se ha hecho más fácil llegar a acuerdos?

Estamos abiertos a hacer acuerdos con todos, uno de nuestros principios fundantes como Independientes No Neutrales es el diálogo abierto, no hay otra manera de llegar a grandes acuerdos. Por lo tanto nosotros hablamos con absolutamente todos. Ahora, la verdad es que si miras la mayoría de las votaciones de este primer mes, superan con creces más de los dos tercios, muchas de las votaciones llegan casi a la unanimidad y eso es muy relevante.

Creo que todo este proceso de conocimiento entre personas tan diversas se está dando en esta etapa, y estoy segura que va a ser muy positivo cuando lleguemos a los temas más complejos. Después de ese diálogo, estás abierto a escuchar lo que el otro dice y eso es indispensable para alcanzar acuerdos de grandes mayorías que es la única forma de legitimar una Constitución por muchas décadas.

– En algún momento fue candidata a presidir la convención, pero luego no postuló a alguna vicepresidencia ¿A qué se debió ese cambio?

No tenía interés en una vicepresidencia, el INN me preguntó si quería ser vicepresidenta, pero dije que no, porque creo que en esta primera etapa me pareció que podía aportar en la comisión de Comunicaciones para dejar instalado un sistema de comunicaciones que nos permita tener una relación con la ciudadanía. Porque después, cuando se creen las comisiones de contenido para redactar la Constitución, a mí no me interesa estar en Comunicación.

– ¿Qué opina de la salida de Miguel Ángel Botto de INN?

Creo que no se sintió cómodo en Independientes No Neutrales y decidió honestamente retirarse del colectivo, tenía todo el derecho y buscará otro colectivo donde se sienta más cómodo. Quizá me equivoque, pero creo que el tenía una diferencia con la mayoría de nosotros, es una historia de una larga militancia en un partido político que los demás no tenemos.

– ¿No se sentía cómodo?

No se sentía cómodo con la manera de trabajar, con la independencia que hay dentro del grupo, porque efectivamente nosotros tomamos acuerdos de líneas generales, fundamentales y básicas, pero a partir de eso cada uno aterriza con sus énfasis, su mirada, con absoluta libertad.

“No hubo polémicas”

– ¿Qué opina de las polémicas a partir de comentarios de constituyentes de derecha, por el tema de los recursos, incluso por el lenguaje usado por algunos constituyentes indígenas?

No hubo ninguna polémica dentro de la Constitución, hubo declaraciones mas o menos estridentes de algunos constituyentes de la derecha.

– ¿Y qué le parece entonces los ataques a la presidenta Loncón?

Creo que quienes han atacado a la presidenta, están en el derecho de hacerlo. Pero la verdad es que son muy minoritarios, creo que se cuentan con los dedos de una mano. La inmensa mayoría de los constituyentes tenemos un profundo respeto por la presidenta Loncón y por el vicepresidente Bassa, que han hecho a partir de la nada, un inmenso trabajo.

Creo que tener una presidenta mapuche es una muestra de que los cambios ya se están produciendo en Chile. Pero no sólo simbólicamente, ella ejerce su presidencia con toda la fuerza que tiene y con toda la cultura ancestral que trae.

– Pero esos comentarios le hacen daño a la Convención, pensando en la imagen que se proyecta a la ciudadanía…

Sí, creo que esos comentarios dañan el trabajo que estamos haciendo y lo dañan sobre todo, porque estamos en medio de una profunda crisis político social, en la cual todas las instituciones están muy desprestigiadas. Por lo tanto, creo que la primera obligación que debiéramos tener todos los constituyentes, es cuidar su prestigio, porque en medio de esta crisis, es un prestigio que es muy fácil de quebrar, y por lo tanto hacer declaraciones imprudentes, hacer declaraciones estridentes que no llevan a nada, es claramente negativo para el prestigio de la constituyente.

Una Convención sin fines de lucro

– ¿Y qué opina de aumentar las asignaciones? ¿Era necesario?

Creo que no hay nadie en esta Convención que haya llegado a lucrar, nadie llegó aquí porque va a ganar más o menos dinero, es decir, aquí todos los constituyentes vinieron a hacer una tarea. Su sueldo se fijó por ley y no ha sido modificado ni un céntimo.

Otra cosa son las asignaciones, que son los recursos que los constituyentes necesitan para cumplir su tarea. Y por supuesto ahí hay grandes diferencias, tenemos constituyentes que están viajando desde los extremos del país a sesionar en Santiago, y por supuesto esos constituyentes necesitan una mayor cantidad de asignaciones que quienes vivimos en la región Metropolitana o alguna región adyacente como Valparaíso o Rancagua. Entonces por supuesto que había que hacer una reasignación de recursos, aquí no se ha aumentado el presupuesto.

Entendemos lo delicado que es gastar recursos públicos que vienen del bolsillo de todos los chilenos, y por lo tanto lo que estamos haciendo es pedir exclusivamente los recursos que se requieren para hacer un buen trabajo, que es lo más importante. Esta Constitución no puede tener un mal resultado, porque sería gravísimo para el país.

Ya se creó un comité externo de asignaciones, que es absolutamente autónomo, que está integrado por representantes de la Tesorería General de la República, la Contraloría, el Consejo Para la Transparencia, el Senado, la Cámara de Diputados y un profesional del área de los pueblos originarios, es decir, ellos son los que van a velar cómo se asignan estos recursos. Y lo que más nos importa, es que esto sea con absoluta transparencia, que haya austeridad y absoluta probidad.

La “imprudencia” de Arancibia

– ¿Qué le parece la participación del almirante en retiro Arancibia en la Comisión de DDHH?

Me parece que en un país donde aún siguen abiertas las heridas relacionadas con las violaciones a los derechos humanos, donde todavía no sabemos donde están muchos de nuestros detenidos desaparecidos, la presencia del almirante Arancibia, es, por decirlo menos, una imprudencia de su parte y de quienes lo patrocinaron para estar en esa comisión, cuando podía haber elegido cualquiera otra de las siete sin ningún problema.

Nadie está negando que el almirante Arancibia fue elegido democráticamente, tiene derecho a estar en la Constituyente y tiene derecho a estar en cualquier comisión. Sin embargo, el haber elegido de las ocho comisiones la de Derechos Humanos, es no empatizar con este dolor, él es una persona que hasta el día de hoy alaba y aplaude a Pinochet y a la dictadura militar, que es precisamente la que cometió las más brutales violaciones a los Derechos Humanos en nuestro país.

– ¿Es una provocación?

Muchos piensan que es una provocación, yo no quiero juzgar intenciones, pero por lo menos es una tremenda imprudencia, es una falta absoluta de empatía con quienes frente a hechos como estos, sufren una revictimización de los horrores que han vivido durante la dictadura.

– ¿Cuál es la evaluación que hace del trabajo de Catalina Parot? ¿Es lo mismo que Francisco Encina?

Yo por lo menos no he tenido mayor relación con Catalina Parot, la saludé y fue muy amable cuando llegó a la Secretaría Técnica. Esta semana la invitamos a la comisión de comunicaciones y esperábamos poder conversar varios temas que nos interesaban, pero desgraciadamente no asistió.

– ¿Y qué le pareció eso?

Me pareció mal y lo manifesté en la sesión, que era complicado que ella hubiera estado porque ella es la persona que se relaciona teóricamente directamente con la Convención y por lo tanto, era indispensable que escuchara todo lo que teníamos que decir y preguntar.

– ¿Qué va a pasar cuando termine la convención? ¿Va a seguir ligada a la política?

No (risas). No, absolutamente. A mí me ha gustado siempre la política desde el periodismo, desde el análisis político, me gusta reportear la política, pero nunca me ha entusiasmado la carrera política. Y si entré a esta aventura, fue precisamente porque era algo muy específico y muy único que se da una vez en la vida de escribir una nueva Constitución.

– ¿Y en el INN han pensado en levantar una lista parlamentaria y candidato presidencial? Porque en la Lista del Pueblo ya tienen un abanderado presidencial…

Independiente No Neutrales se formó para llegar a la Convención y cumplimos con creces ese primer objetivo. Elegimos once y seguimos siendo diez, es decir, se cumplió nuestro primer objetivo ampliamente y ahora nuestro segundo objetivo es lograr plasmar los lineamientos que tenemos en la nueva Constitución. Y luego viene otro objetivo que es fundamental, que es la aprobación ojalá con el mismo 80% que tuvo el plebiscito de entrada.

¿Qué pasará después con Independientes No Neutrales? El tiempo lo irá viendo. Hay un acuerdo de no convertirse en partido en esta etapa. Después que se apruebe la nueva Constitución, se verá qué pasa con el movimiento de Independientes No Neutrales.

– Por último ¿cuál es su candidato presidencial?

No tengo, por ahora. Hay algunos que me gustan más que otros, pero no tengo una decisión tomada.