Quien ya ha sido tres veces excandidato presidencial, Marco Enriquez-Ominami, se quedó fuera del grupo con el que el presidente de Argentina, Alberto Fernández, iba a visitar a su par francés, Emmanuel Macron, durante su gira por Europa.

El hecho fue reportado por el medio trasandino Clarín, el cual destacó que el hecho es llamativo dado que “MEO” fue un integrante clave del equipo de Fernández durante su campaña y luego, cuando ya era presidente electo.

La influencia de Enríquez-Ominami no fue menor, siendo una voz importante en la agenda internacional del actual mandatario argentino, siendo ambos miembros fundadores del Grupo de Puebla.

Según el medio, fue este camino y sus intentos por inclinar al mandatario hacia la izquierda, entre otros asuntos, los que terminaron por hacer que los demás círculos de Fernández le excluyan hasta el punto en que ya no aparece en público junto a él.

Su ausencia en Francia -país en el que creció como exiliado junto a su madre- con la delegación presidencial se explicaría por roces con Felipe Solá, actual Canciller de Fernández, con quien discreparon en duros términos por las conclusiones alcanzadas en el documento final del Grupo de Puebla.

Las discrepancias también le pondrían en conflicto con Jorge Argüello, quien será el nuevo embajador argentino ante los Estados Unidos, y el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Beliz, quien busca presidir el Banco Interamericano de Desarrollo.

Según fuentes de El Clarín, “se buscó por todos los medios alejar a Fernández de Ominami”, debido a “cierta confusión de la actuación en política exterior del dirigente chileno con negocios privados expresados en su vínculo con Mariano Mussa, su máximo operador en el ámbito internacional, y quien trabaja a su vez con Cecilia Nicolini, hoy cercana a Ricardo Foster, del consejo de asesores presidencial”.

Sin embargo, junto con los pedidos de renuncia de MEO al presidente Sebastián Piñera, habrían sido errores en la gestión de una entrevista de Fernández con Macron.

Ésta habría estado planificada para diciembre pasado mediante los vínculos de MEO con el gobierno francés, pero debió ser reprogramada y luego gestionada por la Cancillería argentina, por los canales oficiales.

Entorno de MEO descarta conflicto

Respecto de este punto, consultados por El Clarín, desde el entorno de MEO afirmaron que la cita se cayó por una “decisión de Cancillería”, defendiendo que no hay contradicción entre el trabajo privado de Enríquez-Ominami y sus gestiones en política exterior.

En tanto, fuentes que rodean a Enríquez-Ominami afirmaron a BioBioChile que “todo es falso”, y que el excandidato se ausentó de la gira por europa debido a compromisos laborales.

Aseguran asimismo que MEO ayudó a Fernández por la amistad de años que mantienen, pero que no es su “canciller en las sombras”, como le llaman en Argentina.

Últimamente, indicaron, Enríquez-Ominami se ha dedicado al Foro Latinoamericano de los Derechos Humanos efectuado en Santiago,, y en la preparación del próximo encuentro del Grupo de Puebla a efectuarse en Santa Marta en mayo de este año, y en la campaña del PRO por el “Apruebo” en el plebiscito constituyente.