El presidente de la Asociación de AFP, Andrés Santa Cruz, acusó un veto por parte del Gobierno para ser parte de las opciones que administren el 4% adicional que establece el proyecto de reforma previsional. En la Democracia Cristiana enfatizaron que no estarán sus votos si no se cumple con un ente estatal como administrador de ese porcentaje.
La administración del 4% adicional ha comenzado a generar división, y todo apunta a que será quizás uno de los focos de discusión más complejos en el trámite en particular del proyecto de reforma previsional, y uno de los puntos que tendrá al gobierno entre la espada y la pared, entre las presiones de su sector y de la Democracia Cristiana.
Si bien no aludió directamente a la cifra, ni dio mayores certezas, el presidente Sebastián Piñera instó a continuar con el avance de la iniciativa.
“Escuché a muchos decir ‘ni un peso más a las AFP’, yo quiero decir que lo que no podemos hacer es que no llegue ni un peso más a nuestros pensionados, que son los que más lo necesitan”, enfatizó.
El presidente de la Asociación de AFP, Andrés Santa Cruz, en entrevista con el programa Expreso Bío Bío, acusó al Gobierno de vetarlos en el proyecto para participar en la administración del 4%.
“Parece increíble que uno quiera vetar que alguien participe en alguna actividad económica, la verdad que esto mañana se puede extrapolar al resto de las actividades económicas”, advirtió.
Asimismo, descartó además una “campaña del terror”, como han acusado desde la oposición.
“No hay campaña del terror, a nosotros no nos preocupa competir por el 10% ni por el 4%, en la medida que todos compitamos en las mismas condiciones”, dijo.
La misma postura tiene el oficialismo. Así lo manifestó el diputado de Renovación Nacional, Alejandro Santana, quien se sumó a la presión para que sea el cotizante quien elija quién le administra ese porcentaje.
“Nosotros somos partidarios de que exista una institución del Estado que sea parte de una oferta para administrar este 4%. Pero creemos importante no quitar la libertad de elección, los que tienen la decisión final de dónde invertir sus fondos, debe ser cada uno de los cotizantes, de los futuros pensionados”, subrayó.
En medio de ese escenario, la Democracia Cristiana fijó su postura de forma radical.
El diputado Gabriel Silber sentenció que el ente del Estado “es patria o muerte”, advirtiendo que si ese compromiso no se cumple, no habrá votos desde la DC para continuar la tramitación.
“Hoy día vemos como la industria de las AFP está instalando esta campaña de terror, ha nacido el fuego amigo de la propia derecha económica y para nosotros esto si que es patria o muerte”, señaló.
“Este 4% va a ser administrado por una entidad estatal, de lo contrario los votos de la Democracia Cristiana no van a estar disponibles para impulsar una medida o una reforma que no vaya en esta línea”, enfatizó.
No obstante las declaraciones de Silber, al interior de la Democracia Cristiana aún se mantienen las tensiones por el apoyo a la iniciativa de La Moneda.
La próxima semana la bancada DC zanjará la situación del diputado Raúl Soto al mando de la comisión de Trabajo, de donde quieren marginarlo por estar en contra de la postura de su partido, al rechazar la idea de legislar.
El mismo Soto dijo esperar que eso se rectifique y su partido lo mantenga al mando de la comisión, defendiendo su postura “díscola”.
“Es un poco contradictorio que quien está haciendo las vocerías sea la misma persona que quiere sacarme del cargo y reemplazarme, el diputado Silber”, criticó.
“Estoy total y absolutamente tranquilo, creo que tengo los argumentos reglamentarios y políticos para que esta situación se pueda rectificar”, añadió.
A esa reunión no asistirá la directiva del partido, desde donde el presidente, Fuad Chahín, sostuvo que apoyan todas las medidas de la bancada, aunque agregó que quien integre la comisión de Trabajo debe representar los intereses de la bancada y de la Democracia Cristiana.
