La tormenta bursátil que se desató el miércoles en Wall Street, y que significó fuertes caídas el jueves, se atenuaba este viernes en los parqués asiáticos, aunque una parte de los índices seguían a la baja.

Tras haber abierto con un retroceso del 1,18%, el índice Nikkei 225 de la bolsa de Tokio remontó el vuelo y, a media sesión, apenas cedía un 0,45% hasta los 22.488,86 puntos. La víspera había perdido un 3,9%.

El índice general Topix de la bolsa tokiota caía, por su parte, en un 0,55% hasta los 1.692,43 puntos.

La bolsa de Hong Kong abrió al alza este viernes, con una subida del 0,31% del índice Hang Seng hasta los 25.345,06 puntos.

Sin embargo, en China continental, la bolsa de Shanghái, que había perdido más del 5% el jueves, abrió con una nueva caída del 0,36% hasta los 2.574,04 puntos.

Y la bolsa de Shenzhen cedía un 0,64% hasta los 1.285,57 puntos, un día después de caer en un 6%.

En Corea del Sur, el Korea Composite Stock Price Index (Kospi) subía en cerca del 1% hasta los 2.150,65 puntos por la mañana, y el Taiex de Taiwán crecía en un 0,50% hasta los 9.855,21 puntos.

Los analistas se muestran prudentes, a pesar de este regreso a una calma relativa en Asia tras una nueva sesión negativa en Wall Street el jueves.

Las críticas del presidente Donald Trump sobre las alzas de las tasas de interés del banco central estadounidense avivaron las preocupaciones sobre las consecuencias de esta política sobre el crecimiento.

La espiral negativa en las bolsas afectó el jueves al conjunto de los sectores en Estados Unidos, especialmente la salud, la banca y la energía.

Según Nate Thooft, de Manulife AM, la caída de los índices fue fruto de varios factores que van desde el “alza de las tasas de interés del banco central estadounidense hasta los temores de malas noticias durante la temporada de resultados que empieza”.

“La preocupación también persiste a propósito de las tensiones comerciales sino-estadounidenses”, indicó, por su parte, Stephen Innes, de la compañía Oanda.