El mar Rojo es escenario de un conflicto iniciado tras los ataques de los hutíes contra navíos mercantes, que provocaron que Estados Unidos y el Reino Unido bombardearan posiciones de los insurgentes en el Yemen para limitar sus capacidades militares y sus ataques en esta vía, por donde transita alrededor del 15 % del comercio marítimo mundial.

Un misil impactó hoy contra el costado de babor de una embarcación que se encontraba al sureste de Adén, frente a las costas del Yemen.

Todo esto, en medio de una escalada de tensión por el intercambio de ataques en el mar Rojo entre los rebeldes hutíes yemeníes y Estados Unidos, informó la Marina británica.

“El capitán informa de que un misil golpeó desde arriba el costado de babor del buque”, dijo la entidad de la Marina británica Operaciones Marítimas Comerciales (UKMTO) en una alerta, en la que especificó que el incidente se produjo a unas 95 millas náuticas al suroeste de Adén.

La UKMTO no ofreció detalles sobre los daños causados por el misil, mientras que los rebeldes hutíes hasta el momento no han reivindicado la acción.

Cabe destacar que los hutíes afirmaron que seguirán impidiendo la navegación de barcos de Israel o que se dirijan a puertos israelíes, según la televisión Al Masira, controlada por los rebeldes.

Una fuente de los rebeldes dijo a la cadena que sus fuerzas navales “están listas para hacer frente a cualquier emergencia o amenaza a la seguridad de la navegación en la región”.

Luego de todo lo anterior acusó a Estados Unidos y al Reino Unido de provocar disrupciones en el mar Rojo con sus ataques contra el Yemen.

Testigos informaron a la Agencia EFE que poco antes los insurgentes lanzaron misiles desde el norte de la provincia de Al Dhalea en dirección al golfo de Adén.

Se trata de un importante punto de acceso al mar Rojo para los buques petroleros contra el que los hutíes han lanzado decenas de ataques para dañar económicamente a Israel en apoyo a los palestinos de la Franja de Gaza.

De acuerdo con los informantes, uno de los proyectiles impactó en una área abierta del distrito de Jihaf, a unos 30 kilómetros de su punto de lanzamiento.

Esto último provocó una gran explosión; mientras que fuentes del Gobierno yemení afirmaron que otro misil fallido impactó en la costa del estrecho de Bab al Mandeb.