Narges Mohammadi no pudo recibir el galardón debido a que se encuentra detenida desde 2021 en Teherán. Fue premiada por su lucha por “derechos humanos básicos”.

La encarcelada activista iraní Narges Mohammadi reclamó al recibir el Nobel de la Paz en el ayuntamiento de Oslo este domingo, por medio de sus hijos, apoyo internacional para acabar con un régimen iraní “en su nivel más bajo de legitimidad y respaldo popular”.

Mohammadi suele protestar contra la pena de muerte y el uso obligatorio de velo para las mujeres, y está detenida desde 2021.

“La juventud de Irán ha transformado hoy las calles y los espacios públicos en un escenario de resistencia civil generalizada. La resistencia está viva y la lucha perdura”, señaló Mohammadi en un discurso escrito desde la cárcel de Evin y leído, por deseo de la premiada, por Kiana y Ali Rahmani, sus dos hijos gemelos de 17 años, que vistieron de negro para la ocasión.

Mohammadi, de 51 años y que esta misma jornada comenzará una nueva huelga de hambre para solidarizar con la minoría religiosa bahaí, que es perseguida en su país, se mostró “confiada” en que “la luz de la libertad y la justicia brillarán intensamente en la tierra de Irán”.

En su ausencia, un asiento quedó simbólicamente vacío, coronado por su retrato.

“Mujeres valientes de Irán”: el mensaje de la premio Nobel de la Paz

“Soy una mujer de Medio Oriente, de una región que, aunque es heredera de una rica civilización, se encuentra actualmente atrapada en la guerra y presa de las llamas del terrorismo y el extremismo”, afirmó en su mensaje.

“Soy una mujer iraní que se siente orgullosa y honrada de contribuir a esta civilización, que hoy es víctima de la opresión de un régimen religioso tiránico y misógino”, añadió.

“El Nobel de la Paz de este año reconoce a todas las mujeres valientes de Irán, y de todo el mundo, que luchan por derechos humanos básicos y por poner fin a la discriminación y segregación de las mujeres”, dijo en su discurso previo la presidenta del Comité Nobel noruego, Berit Reiss-Andersen, en una ceremonia presidida por los reyes Harald V y Sonia.