En Irán se confirmó la jornada de este lunes que estudiantes que no cumplan las leyes que imponen el uso del velo no recibirán servicios educativos.

El Ministerio de Educación de Irán anunció este lunes que los centros educativos podrán dejar de ofrecer servicios a las estudiantes que no cumplan las leyes que imponen el uso del velo, en medio de fuertes tensiones por el uso de esta prensa obligatoria en el país islámico.

“Todas las universidades y centros de alta educación dependientes de este Ministerio de Educación están exentas de proporcionar servicios educativos y sociales a las pocas estudiantes que no cumplen las normas y regulaciones de las universidades”, indicó el ministerio en un comunicado.

El departamento indicó que “el velo y la castidad son una obligación” de las estudiantes, quienes deben acatar las leyes del país.

Por su parte, el Ministerio de Salud afirmó que las universidades bajo su supervisión no atenderán a las estudiantes que no se cubran con un velo.

El anuncio coincide con el reinicio del curso escolar tras las dos semanas de vacaciones del año nuevo persa, Noruz.

Muchas mujeres iraníes han dejado de usar el obligatorio velo islámico como forma de protesta y desobediencia civil desde la muerte en septiembre pasado de Mahsa Amini, tras ser detenida precisamente por llevar mal puesto el hijab.

La muerte de Amini provocó fuertes protestas en todo el país, en las que se pedía el fin de la República Islámica, donde las universidades, institutos e inclusos colegios jugaron un importante papel.

En los últimos días, se han intensificado las tensiones por la falta de uso de esta prenda, obligatoria en el país desde 1983, con llamadas de clérigos y conservadores a imponer el hijab.

El viernes se hizo viral un vídeo en el que un hombre echa yogur por la cabeza a dos mujeres por no llevar el velo.

La Justicia iraní ordenó el arresto de las dos mujeres por ir sin velo y el del agresor por “alterar el orden público”.

Además, las autoridades están cerrando tiendas y comercios que atienden a mujeres sin velo, en una medida destinada a imponer de nuevo esta prenda.

La represión estatal causó la muerte de unas 500 personas en las protestas por la muerte de Amini, la detención de miles y el ahorcamiento de cuatro manifestantes, uno de ellos en público.