Unos cuatro mil simpatizantes de la derecha nacionalista rumana se agolparon este martes frente a las entradas a la sede del Parlamento en Bucarest para protestar contra un proyecto de ley que prevé exigir el pasaporte covid en algunos lugares de trabajo. Algunas decenas lograron irrumpir en las instalaciones.

Decenas de personas irrumpieron este martes en el complejo del Parlamento de Rumanía en el marco de las protestas convocadas por la ultraderecha contra las restricciones adoptadas para contener la pandemia de COVID-19, sin que la Policía interviniese inicialmente.

El nuevo primer ministro, Nicolae Ciuca, exhortó al Ministerio del Interior a garantizar la integridad de los edificios públicos, ante la posibilidad de incidentes violentos durante unas movilizaciones que tienen al Gobierno en su punto de mira.

La formación ultraderechista AUR, detractora de la vacunación contra la pandemia, apeló a la movilización ciudadana, en un momento en el que los diputados precisamente debaten si introducir medidas como la obligatoriedad del pasaporte COVID.

Más de un millar de personas se concertaron ante las puertas del Parlamento y decenas de ellas lograron acceder al interior del recinto, si bien la Policía ha considerado la situación bajo control, según la cadena de televisión Digi24. Sin embargo, varios vehículos han sufrido daños.

Rumanía tiene la segunda peor tasa de vacunación de toda la UE, si bien tras el peak de contagios de octubre la tasa de incidencia ha disminuido en las últimas semanas.