Los colaboradores de Alexéi Navalni denunciaron este jueves las amenazas que pesan sobre “la vida y la salud” del opositor ruso. Indicaron que lo habrían torturado impidiéndole dormir, en respuesta a los servicios penitenciarios, que aseguraron que su estado es “satisfactorio”.

En una queja dirigida a las autoridades y publicada el jueves en su página web, el detractor del Kremlin explicó que los guardianes lo despiertan “ocho veces cada noche”.

Los guardianes “me impiden dormir, se trata de hecho de tortura mediante privación de sueño” escribió el disidente.

En otra carta, Alexéi Navalni pidió recibir atención médica, en tanto sus colaboradores afirman que su salud está empeorando.

Olga Mijailova, una de las abogadas de Navalni, indicó el jueves que el opositor padecía fuertes dolores de espalda y en la pierna derecha. Afirmó que temía por “la vida y la salud” del opositor, que el pasado agosto fue envenenado con un agente neurotóxico.

“Para mí, su estado de salud es por supuesto extremadamente problemático”, declaró a la cadena Dojd, afín a la oposición.

Según ella, Alexéi Navalni fue llevado el miércoles por la noche a un hospital público donde fue sometido a una resonancia magnética.

Navalni, que cumple una condena de dos años y medio de prisión, sobrevivió el año pasado a un envenenamiento que atribuye al Kremlin.

La abogada consideró que podría haber una relación entre sus problemas de salud actuales y su intoxicación.

La esposa del disidente, Yulia Navalnia, denunció por su parte una “venganza personal” del presidente Vladimir Putin, y exigió de nuevo su liberación inmediata.

Navalni sufre de dolores de espalda desde hace un mes aproximadamente, y “la situación solo hace que empeorar”, advirtió la esposa.

Solo ibuprofeno

Por su lado, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, aseguró que la presidencia “no sigue” la situación y “no ha pedido ninguna información” sobre la salud de Navalni.

Al regresar a Rusia en enero pasado, Nalvalni fue detenido y condenado por un caso de fraude que data de 2014.

El principal opositor del presidente Vladimir Putin se encuentra recluido desde inicios de marzo en una colonia penal en Pokrov, a 100 km al este de Moscú.

Mijailova dijo que un neurólogo examinó al opositor por sus dolores de espalda y problema en las piernas. Pese a esto, se limitó a darle comprimidos de ibuprofeno, un fármaco analgésico y antiinflamatorio.

Desde su llegada a Pokrov, Navalni ha publicado dos mensajes en Instragram con tono burlón y optimista.

Navalni cayó en coma súbitamente en agosto pasado en Siberia. Después de su evacuación a Alemania, laboratorios europeos estimaron que habría sido envenenado un agente neurotóxico de la era soviética.

Pero Moscú siempre ha rechazó estas conclusiones, que acreditan la tesis de un intento de asesinato orquestado por el poder ruso. En Rusia no se ha abierto ninguna investigación.

Navalni acusa a Putin de ordenar el intento de asesinato, lo que el Kremlin insiste en rechazar.

La Unión Europea, Estados Unidos y Canadá han adoptado sanciones contra altos responsables rusos, tras el envenenamiento.