Un tribunal militar de Moscú desestimó el lunes una denuncia del opositor encarcelado Alexéi Navalny, que acusaba a los investigadores de “inacción” tras negarse a abrir una investigación por su envenenamiento en Siberia el año pasado.

Una portavoz del tribunal militar de la guarnición 235 de Moscú confirmó a la agencia noticiosa AFP que la petición del principal opositor al Kremlin, que actualmente cumple una condena de dos años y medio en una colonia penal, fue rechazada.

Navalny no estuvo presente en la audiencia y se negó a participar por videoconferencia desde la colonia penal de Pokrov, a 100 km al este de Moscú, donde está recluido.

El opositor reprocha a los investigadores rusos de no abrir una investigación sobre su envenenamiento en Tomsk el pasado 20 de agosto.

AFP

Navalny fue víctima de una sustancia identificada por los laboratorios europeos como Novichok, un agente nervioso militar desarrollado en la época soviética.

Pasó varios meses en coma en Rusia y luego en Alemania, de donde regresó en enero para ser inmediatamente detenido a su llegada.

Navalny fue condenado a dos años y medio de prisión por un caso de fraude en 2014 que él considera político y es objeto de múltiples procesos judiciales.

Acusó a los servicios de seguridad rusos, el FSB, de estar detrás de su envenenamiento, por orden del Kremlin.

La policía rusa puso en marcha en agosto un “examen preliminar” del caso tras la hospitalización de Navalny e inspeccionó los lugares donde había estado e interrogó a testigos.

Sin embargo, dictaminó que no había pruebas que sugirieran que se hubiera cometido un “delito”. Y ningún análisis ruso ha encontrado ninguna sustancia tóxica en su cuerpo, según las autoridades.

Rusia siempre rechazó las peticiones occidentales de una investigación considerando que Navalny no fue envenenado y culpando a los servicios secretos extranjeros o incluso al estilo de vida del opositor.