Un adolescente de 17 años fue declarado culpable por asesinar a una asistente educacional de 47 años en Lancashire, Inglaterra, para luego ocultar su cuerpo en un cementerio.

Según reportó el medio local LancsLive, el caso data del 24 de agosto de 2019, cuando el cuerpo desnudo de la mujer, identificada como Lindsay Birbeck, fue encontrado 12 días después de su desaparición luego que saliera a caminar.

Para aquella tarde había invitado a su hija adolecente y el novio de ella para tomar el té.

Finalmente, el cadáver fue encontrado por un hombre que paseaba a su perro, en una tumba de baja profundidad en el cementerio de Accrington, envuelto en bolsas de plástico.

Los peritajes concluyeron que murió estrangulada, con “daño aplastante extensivo” en su nuca. También se constató el intento de “cortar” sus piernas tras el deceso.

Pese a que el menor negó su participación en el crimen, aseguró a la policía que un desconocido le ofreció “mucho dinero” por “deshacerse del cuerpo”. Según la defensa, la mujer fue asesinada por alguien conocido, no en un ataque aleatorio como parece ser el del adolescente.

“No he visto a este hombre antes. No lo he visto desde entonces, ni he tenido contacto con él, y no me ha pagado mi dinero”, declaró. “Me dijo que me iba a dejar el dinero cerca de donde estaba el cuerpo en un principio una vez todo esté listo”.

Según constató DailyMail, una cámara de seguridad le habría captado cargando el cuerpo en un basurero con ruedas.

El cuerpo no tenía señales de asalto sexual, moretones, cortes, puñaladas, golpes a la cabeza ni “heridas defensivas”, destacaron.

Sin embargo, el persecutor afirmó en el juicio este lunes que el acusado estaba “merodeando y escogiendo como blanco a mujeres” cuando asesinó a la víctima, y que luego creó una “obra de ficción” para confundir la investigación, tachando su declaración como un “completo sinsentido”.

Finalmente, se le declaró culpable y queda a la espera la sentencia.