Donald Trump será el primer expresidente de Estados Unidos en enfrentar un juicio penal, cuando el 25 de marzo comience la selección del jurado por un caso de pagos para comprar el silencio de una actriz porno, anunció un juez de Nueva York este jueves.
El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, será juzgado por los presuntos pagos irregulares a la actriz porno Stormy Daniels a partir del 25 de marzo, confirmó este jueves un juez en Nueva York.
Ese día se dedicará únicamente a la selección del jurado, según lo dio a conocer nuestro medio asociado DW.
El magistrado Juan Merchan anunció su decisión ante el propio Trump, que este jueves se desplazó al tribunal de Manhattan.
Lo anterior, para intentar junto a su equipo legal que el juez desestimara los cargos -con el argumento de que interferiría con la campaña electoral-, lo que le fue denegado.
Además se dio a conocer que el juicio durará unas seis semanas, confirmó Merchan.
Merchan explicó a la defensa del exmandatario que ha mantenido consultas con la jueza Tanya Chutkan, que debe juzgar el caso por presunta interferencia electoral contra Trump en Washington D.C.
Esto se entiende sobre los posibles conflictos de fechas para coordinar la celebración de ambos juicios.
Pero el proceso en Washington se encuentra en pausa mientras se decide la apelación presentada por el equipo legal del expresidente para que ese caso sea desestimado.
Trump está acusado de 34 delitos en relación con los 130.000 dólares que pagó a Daniels durante la campaña presidencial de 2016.
Todo lo anterior, para ocultar un ‘affaire’ que habían tenido diez años antes, un pago que fue ocultado con la colaboración de su entonces abogado, Michael Cohen.
Trump se enfrenta a un complicado calendario de juicios desde hoy: el viernes se prevé que otro tribunal neoyoquino pronuncie su sentencia final en un caso civil contra la Organización Trump.
Esto podría costarle entre otras cosas su prohibición para operar en el sector inmobiliario en el estado donde tiene por ejemplo su famosa Torre Trump.
Afrontará después cargos federales en Florida por su manejo de documentos clasificados tras abandonar la presidencia, más otro caso por sus intentos de revertir los resultados electorales.
