A los 100 años murió el ex secretario de Estado, Henry Kissinger, quien jugó un papel fundamental en el derrocamiento de Salvador Allende y el apoyo que le brindó Estados Unidos a la dictadura de Augusto Pinochet.

El ex secretario de Estado estadounidense Henry Kissinger falleció este miércoles a los 100 años de edad en su hogar en Connecticut, informaron los medios de Estados Unidos.

Su empresa de consultoría confirmó el fallecimiento, aunque no ofreció detalles sobre la causa de la muerte.

El legendario y controvertido diplomático se había mantenido activo hasta el final, a pesar de su avanzada edad. El pasado julio visitó China, ya cumplidos los 100 años, para reunirse con el mandatario del país, Xi Jinping, y funcionarios de alto rango.

También ha sido frecuente ver sus opiniones en los medios sobre asuntos de actualidad como la guerra en Ucrania o los riesgos de la inteligencia artificial.

Kissinger nació el 27 de mayo de 1923 en Fürth (Alemania) en el seno de una familia judía que llegó a Nueva York huyendo del nazismo cuando todavía era un adolescente.

Recibió el premio Nobel de la Paz junto a su homólogo vietnamita Le Duc Thuo por sus negociaciones secretas para acabar con la guerra de Vietnam, y normalizó las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y China durante la presidencia de Richard Nixon (1969-1974).

Golpe de Estado en Chile

Sin embargo, también se le recordará por su respaldo a dictaduras como las de Argentina entre 1976 y 1983 y los últimos años del régimen de Francisco Franco en España (terminado con la muerte del líder en 1975), su papel en la Operación Cóndor para reprimir a opositores latinoamericanos de izquierda o su apoyo al golpe de Estado contra Salvador Allende en Chile en 1973.

Es, hasta el momento, la única persona en la historia de Estados Unidos que ha ocupado a la vez los cargos de secretario de Estado y asesor de Seguridad Nacional.

Le sobreviven su mujer, Nancy Maginnes Kissinger, dos hijos de su primer matrimonio, y cinco nietos. Sus familiares sugirieron en el comunicado que, en lugar de flores, la gente envíe donaciones al hospital para animales Animal Medical Center, en Nueva York.