China acusó este martes al ejército indio de haber cruzado ilegalmente su frontera en el Himalaya y de haber recurrido a “disparos de advertencia”, después de un enfrentamiento en junio entre los dos gigantes asiáticos.

Las dos potencias mantienen litigios fronterizos en el techo del mundo. A mediados de junio hubo un enfrentamiento extremadamente inusual, a más de 4.000 metros de altitud, entre soldados indios y chinos en Ladakh (norte de la India).

La escaramuza causó 20 muertos en las filas indias y un número indeterminado de víctimas en las chinas. La muerte de soldados indios provocó una ola de indignación en su país.

En un comunicado publicado el martes, el ministerio de Defensa chino acusó a India de “grave provocación militar” después de que soldados cruzaran la víspera la frontera y “efectuaran disparos de advertencia”.

“Las tropas chinas de defensa de la frontera se han visto obligadas a tomar contramedidas apropiadas para estabilizar la situación en el terreno”, añade el texto, sin precisar cuáles.

Por el momento Nueva Delhi no ha reaccionado.

La Línea de Control Real, frontera de hecho entre India y China, no está correctamente delineada.

Esta situación puede llevar a soldados chinos e indios a pensar que la otra parte está violando la línea.

Después del enfrentamiento del 15 de junio, altos mandos del ejército chino e indio se reunieron y acordaron trabajar para mitigar las tensiones.

El viernes, los ministros de Defensa de los dos países mantuvieron un encuentro en Moscú al margen de una reunión internacional. Pero después se acusaron mutuamente de avivar la tensión.

El último conflicto abierto entre los dos países más poblados del planeta se remonta a la guerra relámpago de 1962, en la que el ejército chino derrotó al indio.

Oficialmente, no se han realizado disparos en la frontera desde 1975, en virtud de una práctica que consiste en evitar un verdadero enfrentamiento militar en esta región fronteriza.