La seguridad en las cárceles de Ecuador estará a cargo, a partir de ahora, de la Policía y las Fuerzas Armadas. Esto, con el objetivo de reforzar el control en estos recintos a ocho días de que estallara una inusitada escalada de violencia en el país.

De acuerdo a Europa Press, las autoridades ecuatorianas detallaron que tras los graves hechos de delincuencia vividos en los últimos días, el resguardo en las prisiones contará con el apoyo de la Policía y las Fuerzas Armadas hasta nuevo aviso.

Esto, ya que se estima que la mitad de los delitos perpetrados en las calles se originan y organizan dentro de los muros de las cárceles.

En conversación con la emisora local Radio Centro, el comandante de la Policía de Ecuador, general Víctor Herrera, indicó que con una serie de medidas “a corto y medio plazo” tendrán “más tranquilidad en las calles”.

Para lograr un mejor control en los presidios, Herrera sostiene que se debe redistribuir a los internos no por el grupo criminal al que pertenecen sino que en base a su peligrosidad.

A su vez, enfatizó en la necesidad de aislar a los cabecillas de las bandas.

“Este control lo van a realizar las Fuerzas Armadas y la Policía. El control del interior de las cárceles va a ser responsabilidad directamente de las dos instituciones”, sostuvo.

En tanto, el uniformado explicó que la mayoría de las veces los criminales cuentan con mejor logística y armas más sofisticadas que la Policía.

Es por lo anterior que mencionó la necesidad de que se apruebe la llamada Ley de Extinción de Dominio, la que permitirá que las armas y automóviles decomisados sean entregados de inmediato a las fuerzas del orden.

“Estamos tomando el control de las cárceles del país”, indicó previamente el presidente Daniel Noboa a través de sus redes sociales, añadiendo imágenes del trabajo realizado por las instituciones uniformadas.

“Felicitaciones a las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional. Seguimos trabajando para restaurar la paz para todos los ecuatorianos”, agregó.

Los motines reportados en diferentes cárceles de Ecuador, el asesinato de funcionarios así como la fuga de varios reclusos, incluyendo a peligrosos jefes criminales como José Macías Villamar, alias “Fito”, y Fabricio Colón Pico, dejó en evidencia la escasez de recursos y protección con la que cuentan los trabajadores del servicio nacional penitenciario del país, SNAI.

Cabe destacar que la cifra de detenidos en Ecuador durante la primera semana en la que el presidente Noboa declaró “conflicto armado interno” contra el crimen organizado ascendió a 1.753.

Del total, 158 fueron arrestados por presunto terrorismo. En tanto, las autoridades ecuatorianas afirman haber abatido entre el 9 y el 16 de enero a cinco presuntos miembros de bandas criminales.