El jefe histórico de la derrotada guerrilla maoísta peruana Sendero Luminoso, Abimael Guzmán, de 86 años, fue trasladado este martes desde la prisión de máxima seguridad a un hospital por problemas de salud, informó el Instituto Nacional Penitenciario (INPE).

“Luego de recibir la visita de su abogado defensor, el interno [Guzmán] fue trasladado de forma voluntaria en una ambulancia del SAMU a un hospital cercano” a la prisión de la Base Naval del Callao, donde cumple su cadena perpetua, dijo el INPE en un comunicado publicado en su cuenta de Twitter.

Capturado en 1992, Guzmán sufre desde el sábado problemas de salud, por lo que venía siendo examinado por médicos en la prisión, pero se negaba a ser llevado al hospital, según el INPE.

El exprofesor universitario de filosofía fue visitado por delegados del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y funcionarios de la Defensoría del Pueblo (ombudsman), “pero se rehusó nuevamente a ser trasladado” al hospital, indicó el INPE.

El comunicado no menciona las dolencias que padece, pero el lunes el Ministerio del Interior había indicado que Guzmán sufrió “una baja de su presión” el sábado en la mañana.

El líder de Sendero fue condenado a prisión perpetua como responsable intelectual de uno de los más cruentos conflictos en América Latina, con casi 70.000 muertos en dos décadas (1980-2000).

Agentes de inteligencia lo detuvieron el 12 de septiembre de 1992, sin disparar un tiro, oculto en una casa de tres pisos del distrito limeño de Surquillo, donde funcionaba como fachada una academia de ballet en la planta baja.

Con él cayó también Elena Iparraguirre, también de la cúpula de Sendero, con quien se casaría en 2010 en prisión. Ella tiene ahora 73 años.

Tras su captura y otros golpes de las fuerzas de seguridad, comenzó a declinar la acción de Sendero, pero todavía opera en forma autónoma un grupo remanente en un remoto valle cocalero.