La Justicia argentina inició la mañana de este miércoles un nuevo proceso de extradición a Chile del activista mapuche, Facundo Jones Huala, por el incendio de una propiedad en la región de Los Ríos en medio de una protesta en 2013, acusación que organismos humanitarios consideran una “persecución política”.

A la audiencia asistió la líder de la organización humanitaria Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora, Nora Cortiñas, quien dijo al entrar que “hay una persecución contra el pueblo mapuche”.

Jones, de 31 años y de nacionalidad argentina, conduce la agrupación indigenista Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), que organiza manifestaciones por demandas de tierras en el sur de Argentina.
Una de esas protestas, en 2017, derivó en incidentes con la policía y en la muerte del militante Santiago Maldonado.

Pero el jefe mapuche es acusado por la Justicia de nuestro país de haber participado del incendio en una propiedad en el fundo Pisu Pisué, de la comuna de Río Bueno, en el marco de las protestas y homenajes a Matías Catrileo, quien perdió la vida tras recibir una bala por parte de un carabinero en una ocupación llevada a cabo en 2008.

Lee también: Abogado asegura que Jones Huala ha sido criminalizado previa audiencia por extradición

A Jones se le acusa de tenencia de armas artesanales y municiones, incendio e ingreso ilegal al país. No obstante, el juicio contra el activista requiere una decisión del magistrado la semana próxima.

Si el fallo es favorable a la extradición, el caso será girado a la Corte Suprema y luego a la Cancillería, en un proceso que puede durar entre cinco meses y tres años, según fuentes judiciales.

“Nos persiguen por piedrazos y me acusan de destruir una propiedad, pero nuestras demandas están tan dentro de la Ley que tienen rango constitucional”, dijo el acusado.

En 2016, un juez rechazó el pedido de extradición a Chile. En aquel proceso, Jones estuvo acompañado por el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel.

Pero aquella medida absolutoria fue apelada y ahora quedó en manos de otro magistrado ante el cual compareció esta jornada en un gimnasio de la ciudad de Bariloche, todo en medio de un fuerte contingente policial. Dirigentes de Derechos Humanos fueron autorizados a ingresar a la audiencia, junto con 23 familiares del activista.

En Chile, un Tribunal de Valdivia dejó en libertad en 2014 a otros acusados por el incendio. No hubo pruebas para vincularlos al delito, pero dictó prisión contra una encubridora.

“Somos el pueblo mapuche confrontando a un poder capitalista que tiene miedo, más allá de un sabotaje, porque podemos influir en otros pueblos y sectores sociales”, dijo Jones Huala.

Tierras de Benetton

Un predio de la comunidad Pu Lof de Cushamen, ubicada a 1.800 metros al sudoeste de Buenos Aires, está en poder del magnate italiano Luciano Benetton, misma tierra que fue escenario de un violento allanamiento policial en agosto del año pasado.

“Esto es una persecución política de ambos Estados, argentino y chileno, sin respeto de garantías jurídicas”, dijo a la prensa Jones.

En medio de los disparos de la Gendarmería -policía militarizada- y la huida de las familias ocupantes del predio desapareció Santiago Maldonado, de profesión tatuador y activista social de 28 años.

El hombre apareció ahogado 81 días después en un río que atraviesa la comunidad, en un hecho que aún se investiga.

En tanto, Rafael Nahuel, un mapuche de 22 años; fue muerto a balazos por la espalda, según la autopsia oficial, llevada a cabo en noviembre de 2017, en otro operativo de policías militarizados para desalojar a ocupantes de un predio cerca de Bariloche.

Severa custodia policial

Jones fue llevado hasta el gimnasio en medio de severas medidas de seguridad con carros de asalto para impedir manifestaciones. Lo trasladaron en helicóptero desde la patagónica ciudad de Esquel, otro centro turístico en la precordillera de Los Andes.

En Argentina hay unas 120.000 personas que se reconocen descendientes directos de mapuches. Sólo unos 14.000 viven en comunidades, pero en su mayoría tienen derechos reconocidos y administran territorios.