A días de la final de la categoría “Cantantes”, Carolina Soto, exparticipante y actual coach de Rojo comentó cuál fue el camino que escogió para bajar 22 kilogramos en casi tres meses: una cirugía de manga gástrica que redujo su estómago.

“Llevo toda una vida haciendo dietas, y tuve trastornos alimenticios cuando fui más chica. Empecé a averiguar de operaciones de este tipo con miedo porque había escuchado de malas experiencias”, aseguró la artista en diálogo con Las Últimas Noticias.

De acuerdo a su relato, Soto no era candidata en las listas médicas para este intervención. “No tengo ninguna enfermedad preexistente, no tengo problemas con la insulina o algo similar pero yo quería dejar de ser esclava de las dietas, porque una pasa suprimiéndose de cosas”, contó.

Para la cantante, sobretodo se trató de un descanso mental. “Mi cabeza se agotó. Me topé con personas que se hicieron esta operación y averigüe bien”, dijo.

La coach se sometió a la operación en marzo pasado y, desde entonces, ha debido cumplir un estricto régimen alimenticio. “Estoy comiendo súper poquito pero cada tres horas. bien balanceado y con proteinas pero a tolerancia porque mi estómago no da para más”, aseguró.

A su vez, la cantante explicó qué pasó por su cabeza antes de asumir el riesgo de entrar a pabellón: “Es un tema cultural y es un complemento con mi pega. Me cansé de hacer dietas y ya tengo 25, entonces el resultado de estas no es el mismo que a los 22”, dijo.

Por ahora, a meses de la intervención, Soto aún no asimila los cambios en su cuerpo. “Mi ropa me queda gigante, todo se redujo así que me tuve que comprar pantalones y ropa interior nueva”, comentó la cantante, que pasó de talla 42 a 38.