La conejita Playboy Katie May, conocida como la “Reina de Snapchat”, murió en febrero de este año en Los Ángeles, Estados Unidos, a los 34 años. La industria del espectáculo quedó impactada al enterarse de la noticia, especialmente debido a su repentino deceso.
En un primer momento se habló de un derrame cerebral, pero a ocho meses de su muerte se reveló la real causa de su fallecimiento. En un informe forenses filtrado al portal TMZ, se explica la modelo sufrió lesión en el cuello, causada accidentalmente por un quiropráctico.
El portal que entretención publicó también una copia del certificado de defunción de May, donde se señala que tuvo una “lesión contundente que le torció la arteria vertebral izquierda del cuello y le cortó el flujo sanguíneo hacia el cerebro”, aunque se asegura que fue una muerte accidental.
Recordemos que a finales de enero, la modelo sufrió una caída durante una sesión de fotos, por lo cual asistió al quiropráctico para sanar algunos dolores que le había provocado el accidente. Pocos días después comenzó a sentir fuertes dolores de cuello y fue hospitalizada.
Según consignó el sitio de espectáculos TMZ, los médicos le diagnosticaron una arteria carótida bloqueada, y cayó en coma. Finalmente fue desconectada del respirador artificial.
La mujer, que era madre soltera, tenía una hija de sólo 7 años, razón por la que sus familiares iniciaron una campaña en el sitio de donaciones GoFunMe para recaudar fondos en beneficio de la niña.
May se caracterizaba por subir constantemente sugerentes imágenes, y había posado para importantes revistas, incluyendo Playboy y Sports Illustrated.
