La recuperación del consumo de crudo en 2021 será levemente más baja de lo que la OPEP pronosticó hace un mes, debido a una menor demanda en China y al alto precio de la energía, pero se mantendrá en 2022 y superará el nivel previo a la pandemia hasta unos inéditos 100 millones de barriles diarios.
Ese es el panorama que dibuja la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) en su nuevo análisis del mercado, publicado este jueves, y en el que rebaja en 160.000 barriles diarios, un 0,18%, la cantidad de crudo que el mundo consumirá este año.
Esa revisión supone que el consumo subirá un 6,23% en 2021, hasta mediar 94,44 millones de barriles diarios (mbd), respecto al año pasado, cuando la crisis del coronavirus hundió la demanda en casi un 10%.
Lenta demanda en China
Esa mínima revisión se debe a una “demanda más lenta de lo anticipado en China y en la India” en el tercer trimestre, y también al impacto negativo en la recuperación que se prevé tengan los elevados precios de la energía en los tres últimos meses de 2021.
“Las medidas de contención de la covid-19 localizadas en algunas partes del país y los desafíos económicos llevaron a esta revisión a la baja para China en el cuarto trimestre”, explica la OPEP en su informe.
Con todo, la organización señala que ese ritmo más lento de aumento de la demanda en China quedará superado en la primera mitad del año que viene.
Crecimiento pese al covid
Aunque el grupo petrolero reconoce que la pandemia, los problemas en las cadenas mundiales de suministro y el aumento de la inflación aportan incertidumbres sobre la evolución de la economía mundial, la expectativa es que el crecimiento global se mantenga sin cambios en el 5,6% para este año y el 4,2% para 2022.
Así, la demanda de crudo seguirá aumentando el año que viene al mismo nivel que la OPEP calculó en su último informe, con lo que llegará hasta 100,59 mbd diarios, casi un 1% más que en 2019.
Estados Unidos y China serán los países que liderarán ese crecimiento “gracias a las buenas perspectivas económicas, el control de los casos de covid-19 y la estabilidad de la demanda del sector petroquímico”, indica el informe.
La demanda en los países ricos de Europa, pese a consumir casi un 5% más crudo que el año pasado, quedará claramente por debajo de los niveles anteriores a la crisis, mientras que en América Latina, con 6,49 mbd, la cantidad será prácticamente igual que en 2019, según la fuente.
Petróleo almacenado
En su análisis mensual del mercado, el grupo destaca que la cantidad de petróleo almacenado, que se disparó a principios de 2020 debido al exceso de oferta frente a una demanda reducida por la pandemia, se ha ido reduciendo gracias a la política de recorte de bombeo aprobada por la OPEP y sus socios en abril de 2020.
Ante esa evolución, la llamada OPEP+ (OPEP y aliados, entre ellos Rusia) ha decidido mantener el plan acordado el pasado julio, que consiste en aumentar la producción en 400.000 barriles diarios cada mes hasta recuperar los 5,8 mbd de aquel recorte.
En ese sentido, la OPEP prevé que la demanda del petróleo de sus trece socios sea de 28,7 mbd en 2022, un 4% más que en el presente año.
Sus competidores, liderados por Estados Unidos, bombearán un 4,74% más de crudo que el año pasado, principalmente por las extracciones de crudo de esquisto.
La producción de Rusia se disparará un 9% respecto a este año, según los cálculos de la OPEP.