La competitividad económica de los países de Latinoamérica se ha visto resentida por la irrupción de la pandemia, que ha afectado especialmente a la región; y ha provocado que las mejoras registradas en 2019 y 2020 se hayan diluido, según el informe anual del Centro Mundial de Competitividad de la escuela de negocios suiza Institute for Management Development (IMD).

A nivel global, Suiza lidera la clasificación tras escalar desde la tercera posición; y se mantiene por delante de Suecia -que también mejora su puesto-, y Dinamarca.

¿Y Chile? lamentablemente anotó la mayor caída y se situó en el lugar 44, al bajar en evaluaciones en “desempeño económico” y en “eficiencia” de gobierno y negocios; y a su vez mantener su evaluación en “infraestructura”.

Chile, la mayor caída en la región

Todos los países latinoamericanos que incluye la clasificación anual de la escuela -que estudia la prosperidad y la competitividad económica de 64 países del mundo- han perdido posiciones respecto a la clasificación de 2020.

En este sentido, durante el último año los países de la región analizados -Chile, México, Colombia, Brasil, Perú, Argentina y Venezuela- han bajado de media tres posiciones y han pasado del puesto 54 al 57.

La mayor caída la han registrado Chile (que en 2017 ocupaba incluso el puesto 35) y Perú, que han perdido cada uno seis puestos hasta situarse en el 44 y 58, respectivamente.

México y Colombia han perdido dos puestos hasta situarse en el 55 y el 56, respectivamente, mientras que Brasil ha cedido una posición y cae hasta la posición 57.

Más preocupante es la situación de Argentina y Venezuela, penúltimo y último respectivamente de la clasificación y sin perspectivas de mejora si se atiende a su evolución en los últimos cinco años.

Bajo rendimiento económico

El análisis del rendimiento económico es del que peor salen parados los países de la región, siendo Brasil, en el puesto 51, el que mejor puntuación obtiene tras avanzar desde la posición 56 que tuvo en 2020.

En eficiencia gubernamental, el vencedor casi sin oposición sigue siendo Chile, que se sitúa en el puesto 22, pese a caer dos posiciones, y salvo Perú, que alcanza el puesto 48, el resto de países se sitúan a la cola: Argentina (64), Venezuela (63), Brasil (62), México (59) y Colombia (58).

Respecto a la eficiencia empresarial, Argentina y Venezuela encabezan la clasificación por la parte de abajo, solo superados por Croacia.

En cuanta a infraestructuras, Venezuela, que vuelve a situarse en el último lugar, y Perú (60), son los que peor valoración obtienen.

La clasificación, que este año incorpora el análisis de un nuevo país (Botsuana), estudia la prosperidad y la competitividad de las economías de 64 países a través de cuatro grandes ámbitos: rendimiento económico, eficiencia gubernamental, eficiencia empresarial e infraestructura.

Suiza a la cabeza mundial

A nivel global, Suiza encabeza la clasificación tras ascender desde la tercera posición, gracias a la inversión internacional, el empleo y aspectos relacionados con la educación, las finanzas públicas y el marco institucional.

En el segundo lugar se sitúa Suecia, que sube cuatro puestos respecto a la clasificación de 2020 como consecuencia de su buen desempeño económico, principalmente en economía nacional y empleo.

Completan los cinco primeros puestos Dinamarca (3º), Países Bajos (4º) y Singapur (5º), que cede el primer puesto por la pérdida de empleos, la falta de productividad y el impacto económico de la crisis sanitaria.

En este sentido, el informe apunta que las economías más competitivas destacan por factores como la inversión en innovación, actividades económicas diversificadas y políticas públicas de apoyo.

España cae hasta el puesto número 39, tres escalones por debajo de la posición que obtuvo en los últimos tres años, debido a la gestión de la pandemia y la persistencia de algunos problemas estructurales como la falta de digitalización o la alta tasa de desempleo juvenil.

Las mayores subidas en la clasificación son de Jordania, que escala nueve puestos hasta el 49; Eslovaquia y Kazajistán, que suben siete puestos hasta situarse en el 50 y 35 respectivamente; y Hungría, que asciende cinco posiciones y se coloca en el puesto 42.

Por el contrario, los países que más caen son Arabia Saudita y Polonia, que pierden ocho posiciones y bajan hasta los puestos 32 y 47, respectivamente; Filipinas, que retrocede siete puestos hasta el 52; y Canadá, Chile y Perú, que ceden seis posiciones y se sitúan en los puestos 14, 44 y 58, respectivamente.

Por regiones, Asia Oriental y Central y Europa Occidental y Oriental han ascendido en la clasificación general, mientras que América del Norte y del Sur, Asia Occidental y África han empeorado.