Este viernes se lanzó de manera oficial The Last of Us 2, la esperada secuela del juego de Naught Dog estrenado originalmente en 2013 para la PS3.

La entrega, exclusiva para PS4, no ha dejado a nadie indiferente. Ellie, la protagonista, tiene ahora 19 años y su sangre puede salvar a la humanidad después de que una pandemia asolara a la civilización. El juego cuenta además con algunos paralelos con el mundo actual, como la epidemia del coronavirus.

Y aunque la prensa especializada ha coincidido en otorgar una puntuación casi perfecta a The Last of Us 2, su lanzamiento no ha estado exento de polémica.

Esto, luego que el videojuego se convirtiera en una nueva víctima del review bombing, práctica cada vez más habitual en la que un grupo importante de jugadores deja opiniones negativas en un intento por dañar sus ventas y su popularidad.

Específicamente, esta secuela ha recibido miles de comentarios negativos en el famoso sitio Metacritic, principalmente por parte de quienes sostienen que el título incluye perspectivas políticas que no deberían por qué estar presentes en el videojuego.

“No estoy seguro de por qué todos los juegos tienen que estar inundados con la agenda SJW (Social Justice Warrior o Guerrero de la Justicia Social). No quiero”, indicó uno de los usuarios, mientras que otro escribió: “The Last of Us Parte II, un gran ejemplo de por qué las políticas y las agendas no deberían introducirse en el videojuego”.

En ese sentido, hay que considerar que debido al poco tiempo que ha transcurrido desde su lanzamiento, es probable que la mayoría de estas personas ni siquiera hayan completado The Last of Us 2 aún.

Cabe destacar que el juego “se inspira mucho en los conflictos en curso en el mundo real y en el tribalismo, de los que vemos desgraciadamente ejemplos muy claros en Estados Unidos”, según indicó el productor del juego, Neil Druckmann, a la BBC.

Y es que The Last of Us 2 pone de relieve a las minorías de todo tipo: Ellie es una joven blanca que tiene una amiga bisexual, y otros personajes proceden de minorías étnicas. No obstante, Druckmann rechaza haber recurrido a la carta de la diversidad “solo para quedar bien”.

“Es más bien una forma de enriquecer la historia”, explicó. “Ello no la hace automáticamente mejor, pero hay algo mágico cuando la gente se ve reflejada en los juegos, aumenta nuestro público y creo que es importante”, puntualizó.

The Last of Us 2 está disponible a través de PlayStation Store (59.99 dólares, equivalente a unos 49 mil pesos aproximadamente) así como también en tiendas especializadas y de retail.

Además, en este enlace podrás acceder a la banda sonora oficial del juego, a cargo nuevamente del aclamado compositor Gustavo Santaolalla.