Un cohete comercial que transportaba siete satélites se “perdió” después de su despegue este domingo desde una plataforma de lanzamiento en Nueva Zelanda, admitió esta jornada el director de Rocket Lab, la firma responsable.

“Perdimos el vuelo cuando ya estábamos bastante avanzados en la misión”, tuiteó Peter Beck, fundador y director ejecutivo de la empresa.

La máquina transportaba satélites para las compañías Spaceflight, Canon Electronics, Planet y In-Space Missions, detalló el ejecutivo.

“Lamento muchísimo que hoy no hayamos podido entregar los satélites de nuestros clientes. Tengan todos la seguridad de que encontraremos el problema, lo corregiremos y volveremos pronto a la plataforma”, añadió.

En un comunicado en su sitio web, la empresa Rocket Lab señaló que había experimentado una “anomalía” cuatro minutos después del vuelo y que estaba trabajando estrechamente con la Administración Federal de Aviación en Estados Unidos para identificar la causa.

“La anomalía de hoy es un recordatorio de que el lanzamiento espacial puede ser implacable”, señalaron.

Rocket Lab se presenta como una compañía estadounidense con sede en una subsidiaria totalmente neozelandesa y se especializa en entregar pequeños satélites en órbita terrestre baja.

Sus patrocinadores incluyen a las compañías estadounidenses Khosla Ventures, Bessemer Venture Partners, Lockheed Martin, Promus Ventures y Data Collective.

La misión, que constituía el decimotercer lanzamiento de la carga útil de la compañía, había sido bautizada como “Muestra las fotos, o no sucedió”.