A días del estreno del polémico documental Leaving Neverland, que recoge algunas de las denuncias por abuso sexual infantil contra Michael Jackson, la familia del “rey del pop” apareció en público para defender su honra.

En diálogo con el canal de TV CBS, Tito, Marlon, Jackie y Taj Jackson se refirieron a los testimonios de Wade Robson y James Safechuck, protagonistas del filme, quienes demandaron al cantante en la década del noventa tras una serie de hechos en el rancho de Jackson, Neverland.

En la entrevista, Taj afirmó haber estado presente en las “pijamadas” que organizaba el músico en su mansión, y por las que hoy pesan serias sospechas sobre su conducta.

“Crecí en él (en Neverland), así que para mí no era extraño. Para el resto del mundo, sí, creo que les haya parecido inusual. Quiero decir, no soy ajeno a lo que se ha comentado. Pero cuando realmente estás allí, en esa atmósfera, tan cercana, viendo películas, incluso con sus hijos, como en ‘The Little Rascals’ o ‘Los tres chiflados’, todo era muy inocente”, recordó Taj.

Sobre las denuncias de Robson y Safechuck, el sobrino de Jackson fue enfático: “Odio decirlo, ya que es mi tío, pero es casi como si estuvieran viendo un cheque en blanco”.

La semana pasada, la familia del cantante demandó a HBO por 100 millones de dólares, argumentando una supuesta vulneración de una cláusula de “no desprestigio” entre el cantante y la cadena televisiva a cargo del documental, la misma que en 1992 tuvo en exclusiva los derechos del Dangerous World Tour, la gira que lo llevó a Chile en 1993.

“Creo que el error de mi tío fue que él no lo veía de otra manera. Esa es la cuestión, creo que su ingenuidad fue su perdición, posiblemente”, apuntó el sobrino de Jackson en las pantallas de CBS. “Él no es así, conozco a mi hermano, sé cómo era”, agregó Jackie Jackson, hermano del artista.