El documental del importante, reconocido y “mediático” artista chino muestra verdaderas mareas de personas que se desplazan escapando de conflictos armados, de persecuciones políticas, étnicas o religiosas, de desastres ambientales como sequías y falta dramática de agua o que, “simplemente”, buscan la posibilidad de una mejor calidad de vida para ellos o para sus hijos.

Marea Humana, Ai Weiwei, CorpArtes (c)
Marea Humana, Ai Weiwei, CorpArtes (c)

Weiwei (Beijing, 1957) no escatimó esfuerzos ni recursos para realizar Marea humana (Human Flow): fue rodado en 23 países para así mostrar la diversidad y masividad de este fenómeno, cuya intensidad sólo se puede comparar a la generada por la Segunda Guerra Mundial. Si bien Marea humana (grabada en 2016) se centra en los países de Europa, Medio Oriente y África (en torno al Mediterráneo y sus áreas de influencia), la mirada humana y la voluntad del artista por entender y generar empatía con los refugiados, permiten al espectador reflexionar y hacer las relaciones con otras situaciones, como podrían ser los inmigrantes haitianos, venezolanos, colombianos, ecuatorianos, peruanos, argentinos, coreanos y europeos, entre otros, que han venido y siguen llegando al país. Como también reflexionar sobre cómo han reaccionados las diversas autoridades y líderes localoes, las diversas instituciones, los medios de comunicación y las personas. Y cada uno.

Weiwei invita a una reflexión como individuos, como comunidades y como humanidad que, a pesar de la duración del documental (140 minutos), no sólo no agota… Es posible quedar con la impresión que sólo se ha mostrado la punta de iceberg, y que cada uno puede o debe continuar reflexionando para tomar posturas y jugar un rol más activo para colaborar en la construcción de un mundo mejor.

Marea humana (Human Flow) será parte de la exposición Inoculación, primera exposición del artista en Chile (la que viene itinerando desde Buenos Aires, con algunas variaciones), que se exhibira en CorArtes entre el 27 de abril y el 26 de agosto. En la ocasión, Weiwei también traerá Paso seguro (safe Passage), instalación realizada con cientos de chalecos salvavidas usados por refugiados con los que se cubrirán las columnas del Archivo Nacional.

Las tecnologías de la desencajadura, Máximo Corvalán-Pincheira (c)Las tecnologías de la desencajadura, Máximo Corvalán-Pincheira (c)

La obra Paso seguro de Ai Weiwei recuerda a Máximo Corbalán-Pincheira, que trabajó en el año 2000 con tablones de madera, cámaras de neumáticosy cuerdas para realizar una gran balsa que instaló en plena avenida Matucana, en la Casa Colorada y en la Universidac Arcis, incluyendo cámaras de seguridad en las dos últimas. Un llamado a la reflexión sobre quienes llegan en forma precaria (desde el norte y el sur como desde el extranjero) en busca de oportunidades a la capital.

Orden y fractura, Máximo Corvalán-Pincheira (c)Orden y fractura, Máximo Corvalán-Pincheira (c)