Un reciente estudio que analizó el caso de 14 participantes del reconocido programa “The Biggest Loser” confirmó lo que algunos ex concursantes han venido diciendo por años.

Lo anterior debido a que la pérdida masiva de peso que se muestra en el show, puede ser casi imposible de mantener en el tiempo, de hecho, es más probable que se recupere el peso perdido.

Pero para los especialistas esto no fue algo que sorprendiera. Después de todo, los competidores se dedicaron por entero a perder peso durante unos siete meses, en un ambiente artificial que es imposible de mantener luego de que el programa termina.

Prueba de ello es el caso de Ali Vincent, la primera mujer en ganar el programa luego de pasar de 106 a 55 kilos. Tiempo después reconoció que había recuperado casi todo el peso perdido.

Pero la razón de este fenómeno, en que la persona vuelve a recuperar el peso perdido, va más allá de la fuerza de voluntad, según sostiene Kevin Hall, quién lideró la investigación y científico del National Institute of Diabetes and Digestive and Kidney Diseases del National Institutes of Health.

El experto asevera que los participantes del programa tenían un metabolismo más lento, en comparación a las personas de edad y contextura similar pero que nunca habían tenido una pérdida extrema de peso.

Junto con esto, la investigación determinó 5 conclusiones respecto al programa “The Biggest Loser”, que pasamos a destacar a continuación.

1- La pérdida de peso puede disminuir el metabolismo… lo que no debiera detenerte

La disminución en el metabolismo tiene sentido: una persona que perdió peso es más “pequeña” de lo que solía ser, por lo que requerirá de menos calorías para alimentar los procesos en el cuerpo.

No obstante, los investigadores notaron que los participantes del estudio tenían una tasa metabólica en reposo que era unas 500 calorías más baja que lo que se podría esperar en base a su cuerpo y edad.

2- Volver a ganar algo de peso perdido no necesariamente es un fracaso

Aaron Roseberry, profesor asistente de biología y miembro del Center for Obesity Reversal en el Georgia State University, indicó: “Si, hubo varios que volvieron a ganar peso, sin embargo seguían siendo más ligeros, y en última instancia, más saludables a cómo estaban cuando empezaron en el programa”

3- Sabemos que las hormonas controlan las señales de hambre, pero no hay mucho que podamos hacer al respecto

Actualmente hay cinco medicamentos aprobados por la FDA (agencia del gobierno de los Estados Unidos responsable de la regulación de alimentos, pero ninguno de ellos actúa como reemplazante de la leptina.

De acuerdo al periódico The New York Times, la compañía farmacéutica Pfizer está llevando a cabo una investigación con animales para encontrar una medicina que imite los efectos de la leptina, no obstante esto están en desarrollo.

4- La obesidad es una enfermedad crónica que requiere de cuidados durante toda la vida

El doctor John Morton, jefe de cirugía bariátrica del Stanford Health Care, indica algunos cuidados que las personas con obesidad deben considerar en su vida.

Una nueva y saludable dieta, rutinas de ejercicio que no expongan a la persona a posibles lesiones, al menos siete horas de sueño diario y una estrategia para el control del estrés son algunas de las posibilidades que recomienda el experto.

5- Tal vez nos podríamos enfocar en la salud y en el control del peso, en vez de perder algunos kilos

Morton sostiene que probablemente sea mejor idea comparar a la obesidad con la presión sanguínea, la que puede bajar con la medicación adecuada pero que puede aumentar si es que se deja de tomar la medicina.

“O puedes pensar en la obesidad en términos del cáncer: es mejor cortar de raíz el problema cuando es pequeño, en vez de dejar que el tumor se expanda”, agrega el especialista.