En un comunicado, la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) criticó duramente los alcances de la Reforma Laboral, asegurando que “el proyecto consagra el monopolio sindical, extrema la conflictividad y no ayuda a crear confianzas”.
La CPC señaló respecto el fin al reemplazo en huelga que “la fórmula ideada para reasignar trabajadores que no están en huelga es absolutamente inoperante y está mal concebida”.
A su vez, desde la confederación expresan que “en relación con los servicios mínimos, las alternativas que prevé el proyecto de ley para definirlos son muy restringidas y ponen en riesgo la viabilidad de la empresa y su competitividad“.
Por su parte, el vocero de Gobierno Marcelo Díaz, manifestó que el proyecto de Reforma Laboral seguirá avanzando, ya que es una demanda sostenida del mundo sindical y de los trabajadores de Chile, por lo que continuarán el trámite legislativo tal como ha estado establecido hasta ahora.
“Las declaraciones altisonantes no son el modo de construir acuerdos ni de dialogar. El proyecto se encuentra en el Senado ellos tienen el derecho de emitir las opiniones que estimen convenientes”, concluyó el secretario de Estado.
