Tradicional es ver cada año como miles de fieles y devotos se reúnen cada 16 de julio en honor a la Virgen del Carmen. Costumbre bastante arraigada en Chile y que alcanzó una alta popularidad en el surgimiento de nuestro país, momento en que se expresó una gran devoción hacia ella.

Y que tuvo entre sus devotos a reconocidos personajes históricos como Bernardo O’Higgins durante el período emancipador de Chile y a Arturo Prat, en la Guerra del Pacífico.

Fue así que una vez ocurrido el desastre de Rancagua en 1814, en que los patriotas fueron derrotados por los realistas. Los soldados viajaron a Argentina para reorganizarse y en ese instante fue relevante buscar una imagen de unidad para el ejército libertador, de tal forma que efectuaron una votación secreta, tras la que resolvieron que serían representados por la Virgen del Carmen.

Claramente en ello contribuyeron la devoción que tenían en Mendoza por ella y la participación de varios soldados nacionales en el sufragio que integraban las cofradías carmelitas.

Según consigna el artículo “Pasado y Presente de la Devoción de la Virgen del Carmen en Chile: la imagen de la Parroquia del Sagrario” de la doctora en Historia, Pilar Hevia Fabre, publicado en la Revista Conserva, en enero de 1817 se efectuó una procesión por las calles mendocinas, en las que el Ejército Libertador encabezado por el general José San Martín se encomendó a Nuestra Señora del Carmen.

Un mes después tuvo lugar la Batalla de Chacabuco, en que se impusieron los patriotas ante las tropas realistas, por lo que dicha victoria se atribuyó a que la virgen intercedió por ellos. Lo que trajo consigo la declaración de la Independencia de Chile, momento en que pasó a ser considerada como la protectora de la nueva nación y sus ejércitos.

Sin embargo, en marzo de 1818 volvió a hacerse latente la amenaza realista, por lo que los vecinos de Santiago, junto a las autoridades civiles y de la Iglesia se comprometieron a erigir un templo en el lugar que se diera la próxima batalla, en la que intercediera por los destinos de la incipiente nación.

Tras la palabra empeñada se registra el 5 de abril de ese año la Batalla de Maipú que llevaría posteriormente a la construcción de un templo en honor a la Virgen, que actualmente corresponde al Santuario Nacional de Maipú situado en la comuna del mismo nombre.

Luego de la victoria obtenida en esa batalla, Bernardo O’Higgins, afirmó que el Estado de Chile era deudor de “la protección de la madre de Dios, bajo la advocación del Carmen”, de acuerdo a lo que se recoge en el artículo desarrollado por Pilar Hevia para la revista del Centro Nacional de Conservación y Restauración.

Abrazo de Maipú | Archivo Fotográfico Universidad de Chile | www.educarchile.cl

Abrazo de Maipú | Archivo Fotográfico Universidad de Chile | www.educarchile.cl

Patrona de Chile

Consultado al respecto por ese compromiso adquirido por el héroe patrio, el coordinador de Comunicación y Cultura del Santuario Nacional de Maipú, Manuel Roco Kliebs, en conversación con BioBioChile, dijo que esa proposición “nace principalmente de la consagración hecha por el Ejército Libertador a la Virgen del Carmen promovida principalmente por los soldados y oficiales chilenos en Plumerillo y también por el general San Martín”.

No obstante, destacó que en el caso de O’Higgins existe una raíz más antigua de devoción a Nuestra Señora del Carmen. “Cuando él vuelve de España a Chile le trae a su madre una imagen de la virgen, la que fue posteriormente dejada en su hacienda de Las Canteras. Eso denota que ya había algo más profundo en él, no solamente aquella promesa histórica”.

Pero, no sólo en ese hecho histórico se daría prueba de la devoción, ya que en 1879 durante la Guerra del Pacífico, resaltó otro ferviente seguidor, Arturo Prat Chacón, quien comandaba la Esmeralda y que una vez fallecido en el Combate Naval de Iquique, portaba un escapulario de la virgen.

Eso sí Roco indicó que esta es una costumbre de la Armada, adoptada a partir de la cultura española, en la que “la virgen es la estela del mar que alumbra a los marineros durante sus viajes. Entonces, para tiempos de la Guerra del Pacífico, los marinos recibían un escapulario de la Virgen del Carmen antes de embarcarse a la guerra”.

Pero, tal es la trascendencia de dicho escapulario en esa época que “fue devuelto por el capitán Miguel Grau a la viuda de Prat entre sus pertenencias más importantes, el cual se conserva hasta la actualidad en el Museo del Carmen de Maipú”, añadió.

Mientras que, el director del Instituto de Teología de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC), Pablo Uribe Ulloa, sostuvo que es propio de países en los que predomina el catolicismo que nuestros héroes patrios hayan optado por encomendarse en ella “para nuestro pueblo chileno, la figura de la Virgen María ha sido siempre muy importante”.

Ello explicaría la determinación de O’Higgins y Prat. “Los soldados chilenos recibieron esta fe católica y les fue muy natural encomendarse a la Santísima Virgen para que los ayudara en sus acciones en bien del país”, enfatizó Uribe.

A su vez el académico de la UCSC, destacó que “la devoción y consagración particular del ejército, a la Virgen del Carmen, tiene una serie de sucesos –muchos legendarios- donde distintas batallas se ganaron gracias a la ayuda de la Virgen”.

Muerte de Prat | cuadro de Thomas Somerscales | Museo Histórico Nacional

Muerte de Prat | cuadro de Thomas Somerscales | Museo Histórico Nacional

¿Por qué el 16 de julio?

Si bien hechos de trascendencia nacional como los relatados anteriormente aumentaron la popularidad de la devoción a la hoy conocida como Patrona de Chile, ya en la época colonial su figura se hizo presente en el país.

Ésta llega al territorio nacional traída por los agustinos, de ahí que la primera imagen de la que se tuvo conocimiento está en Concepción.

“La congregación de los padres Agustinos llega a Concepción en 1595, y en 1648 se funda la primera cofradía quienes inician una procesión de la imagen de la virgen del Carmen por las calles de la ciudad el día 16 de julio y organizan otras acciones de devoción y piedad”, recalcó el director del Instituto de Teología de la UCSC, Pablo Uribe.

Respecto a porque se le celebra cada 16 de julio, explicó a BioBioChile, que ese mismo día, pero en el año el 1251, de acuerdo al relato tradicional, al superior general de los padres carmelitas de Inglaterra, Simón Stock, “se le aparece la Virgen María con la forma que hoy conocemos en las imágenes, como la virgen del Carmen”, detalló.

Es decir se caracteriza “por llevar una vestidura color marrón, en un brazo tiene a Jesús bebé y en el otro un escapulario como signo e instrumento de oración. Este hito será el que marcará la fecha de celebración, que en Chile tiene su máxima expresión en la fiesta de la Tirana”, agregó.

Dada su relevancia es que este jueves se celebra una vez más a la Virgen del Carmen en distintos puntos del territorio nacional. Siendo sin duda, uno de los eventos más importantes la Fiesta de la Tirana que se desarrolla en la localidad del mismo nombre, ubicada en la comuna de Pozo Almonte, en la región de Tarapacá. Revisa el programa de actividades contemplado para ese día y las jornadas venideras.

Otra celebración que resalta es la que la se efectuará en el Santuario Nacional de Maipú -ubicado en calle Carmen con 5 de abril- donde destaca al mediodía la Gran Misa de Chile presidida por el cardenal Ricardo Ezzati. Conoce el programa contemplado en dicho lugar de oración.

Mauricio Mendez | Agencia UNO

Mauricio Mendez | Agencia UNO