Un tribunal egipcio condenó este sábado al guía supremo de los Hermanos Musulmanes, Mohamed Badie, a cadena perpetua y confirmó la pena de muerte para cuatro coacusados en un juicio por la muerte de manifestantes.

El 30 de junio de 2013, manifestantes contra el presidente islamista Mohamed Mursi intentaron irrumpir en los locales de la cofradía de los Hermanos Musulmanes en El Cairo y doce de ellos murieron en enfrentamientos con los partidarios del jefe del Estado.

Tres días después de que manifestaciones multitudinarias pidieran la dimisión de Mursi, el ejército lo derrocó.

El sábado, un tribunal de lo penal de El Cairo confirmó cuatro penas de muerte pronunciadas el 7 de diciembre, dos de ellas en rebeldía, constató la AFP. La corte también condenó a cadena perpetua a 14 personas, de las cuales tres en contumacia.

Además de Badie, varios dirigentes de los Hermanos Musulmanes, incluido su adjunto, Jairat al Shater y el expresidente del parlamento Saad al Katatni, fueron condenados a cadena perpetua.

Los condenados fueron declarados culpables de “asesinato”, “de incitación al asesinato” o de “posesión de armas de fuego y municiones”. Pueden recurrir la sentencia.

Al conocer el veredicto, los acusados presentes en el tribunal gritaron “¡abajo el poder militar!”.

Badie fue condenado a muerte en otro juicio por actos violentos, pero el caso está siendo juzgado de nuevo. Asimismo fue condenado otras tres veces a cadena perpetua en otros juicios.

Desde que el exjefe de las fuerzas armadas y actual presidente Abdel Fatah al Sisi derrocó a Mursi, las autoridades lanzaron una represión sangrienta contra sus simpatizantes, causando al menos 1.400 muertos. Y en diciembre declararon “organización terrorista” a la cofradía de los Hermanos Musulmanes.

Las autoridades son acusadas de instrumentalizar a la justicia. Cientos de partidarios de Mursi fueron condenados a muerte en juicios masivos sumarios, y otros 15.000 fueron detenidos.