Este miércoles la justicia comenzó la discusión en torno a la reapertura de la investigación del caso Tsunami, la que pretende una serie de indagatorias, como la declaración -en calidad de imputada- de la presidenta Michelle Bachelet. De no ser aceptada la solicitud, se procederá a la preparación de juicio oral contra los actuales 6 imputados.

El juez del Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, Patricio Álvarez, aseguró que la discusión respecto a si se reabre la investigación por la fallida alerta de tsunami el 27 de febrero de 2010, podría extenderse por varios días, en horarios de 9:30 a 16:30 horas, respecto de los seis imputados por cuasi delito de homicidio.

La extensión que tendrán estas audiencias se debe a que cinco defensores, junto con un querellante, solicitaron la reapertura de la indagatoria con el fin de ejecutar una serie de nuevas diligencias.

Este miércoles expuso el abogado Felipe de la Fuente, quien representa al ex director del Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA), capitán Mariano Rojas, exigiendo cuatro diligencias.

El abogado explicó que una de estas gestiones corresponde a que la Oficina Nacional de Emergencias oficie en detalle el flujo de alertas de maremoto emitidas por el SHOA durante los últimos 20 años antes del terremoto del 2010, para probar que nunca se hizo, pese a que en la carpeta de investigación consta que hay al menos 4 avisos.

De la Fuente subrayó que no existe un fin dilatorio en la solicitud:

El abogado querellante Raúl Meza, insistió en la declaración de la presidenta Michelle Bachelet:

El querellante, abogado Alfredo Morgado, subrayó que no quedaba ninguna gestión pendiente con la presidenta Michelle Bachelet.

En la audiencia, la fiscal occidente Solange Huerta negó la reapertura del caso y desechó incorporar las cuatro pruebas que pedía la defensa del oficial del SHOA, argumentando que son “dilatorias”, “impertinentes” e “inconducentes”.