El rector de la Universidad de La Frontera, Sergio Bravo, descartó que la casa de estudios superiores lucre con su Centro de Formación Técnica Teodoro Wickel.

El pasado domingo, el diario El Mercurio dio a conocer un informe donde señalaba que cinco universidades estatales lucran a través de sus centros de formación técnica, entre las cuales está la Universidad de La Frontera.

El artículo argumenta que por ser sociedades anónimas o limitadas, los controladores de estos institutos o centros de formación pueden retirar utilidades sin vulnerar la ley.

Al respecto, Sergio Bravo calificó de imprudente dicho informe, ya que la formación jurídica del CFT se ampara en una sugerencia del Ministerio de Educación del año 2000, de crear una sociedad anónima cuyo accionista sea la propia universidad.

Además de la Universidad de La Frontera, se acusa de lucro a las universidades de Valparaíso, Tarapacá, de Los Lagos y de Atacama.