Dormir siesta es considerada una práctica beneficiosa por los expertos e incluso algunos países permiten a sus trabajadores hacerlo en medio de la jornada laboral para paliar el cansancio y el estrés. Sin embargo, cuando estos descansos sobrepasan los límites normales pueden ser señal de un problema.

Eso se desprende de un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Cambridge, quienes establecieron que quienes duermen más de una hora de siesta diaria son un 32% más propensos a morir antes de tiempo.

El informe se basó en los datos de la Investigación Prospectiva Europea sobre Cáncer, un sondeo integral de la salud que consideró a más de 25.000 hombres y mujeres del Reino Unido, cuyas edades fluctuaban entre los 40 y los 79 años. De los participantes, 16.000 respondieron preguntas sobre sus hábitos de siestas durante el día, y luego se dividieron en aquellos que dormían menos de una hora y más de una hora, y los que no tomaban siesta.

13 años después, los participantes que tomaron siestas de más de 60 minutos tenían un mayor riesgo de muerte por diversas causas, como enfermedades del corazón, cáncer y enfermedades respiratorias, según recogió el portal de noticias de salud Medical Daily.

Estos resultados se mantuvieron incluso después de considerar la edad, el sexo, la clase social, el nivel educativo, la situación laboral, el índice de masa corporal, el nivel de actividad física, si fumaban o consumían alcohol, si tenían depresión, si ingerían medicamentos, cuánto dormían por la noche y si padecían enfermedades preexistentes.

Los expertos señalaron que el estudio no prueba la causalidad, por lo tanto, no descartan que la causa probablemente sea alguna condición no reportada por los participantes.

“A pesar de una serie de condiciones preexistentes de salud y el uso de medicamentos que se consideró en este estudio, no podemos descartar que nuestros resultados pueden explicarse en parte por los efectos de otros problemas de salud no diagnosticados o medicamentos no incluidos en este estudio, que podrían causar fatiga diurna o sueño”, escribieron.

Por lo tanto, si estás durmiendo siestas demasiado largas, es importante que consultes a un especialista, porque podría ser signo de algún problema de fondo más grave que simple cansancio.

Toma una siesta saludable

Tal como les contamos hace un tiempo en BioBioChile, la siesta que más beneficia a la salud es aquella que dura máximo 30 minutos porque te permite reponerte, pero al mismo tiempo impide que tu cuerpo entre en las etapas más profundas del sueño .

Además, la siesta no debe pasar más allá de las cuatro de la tarde, ni realizarse antes de las doce del día. Según el director del Instituto de Medicina del Sueño de España, Jesús Escribá, “antes de las 12 está muy cerca de cuando te has levantado y después de las cuatro está muy cerca de cuando quieres acostarte y disminuye la inercia del sueño nocturno”.

Por otro lado, el doctor James Maas asegura en su libro “Sleep for Success!”, que es recomendable anotar tareas pendientes para dejar la mente en blanco y descansar sin la preocupación propia de actividades por realizar.

Y si bien se recomienda apagar el teléfono celular para evitar llamadas o mensajes molestos, la autora del libro Snooze … or Lose!, Helene Emselle, aconseja dejar una alarma para evitar exceder el tiempo recomendable de siesta.