La policía paquistaní detuvo este martes a un segundo hombre sospechoso de canibalismo por haberse comido con su hermano a un bebé, cuya cabeza fue hallada en su domicilio del centro del país.
El lunes las autoridades habían detenido en el remoto pueblo de Darya Khan, en Punyab, a Mohamad Arif, quien confesó haber cocinado y comido a un bebé que su hermano exhumó previamente de un cementerio vecino.
Tras la revelación, la policía inició las pericias encontrando la cabeza de un recién nacido de dos días en la vivienda que compartían los dos hombres. Posteriormente lanzó una vasta pesquisa para dar con el hermano fugitivo.
Pero la huida concluyó este martes, luego que el jefe de la policía del distrito local de Bhakkar, Ameer Abdula, anunciara que el segundo sospechoso había sido detenido.
Los dos hermanos, abandonados desde hace años por su familia, habían sido encarcelados en 2011 por un caso similar de canibalismo y liberados el año pasado.
En Pakistán no hay ninguna ley que prohíba el canibalismo, una práctica rarísima en este país, al igual que en el resto del mundo.
Las autoridades entablaron un caso por “profanación” de cadáveres contra los dos hermanos, que serán sometidos a exámenes psiquiátricos.